viernes, 31 de octubre de 2014

¡NECIOS!

Desde luego, nadie está hecho para este mundo.

Lo estamos para otro.

Pero, claro, si no crees eso, ¿para qué respetar al prójimo?, ¿qué sentido tiene la decencia?, ¿por qué no aprovechar la oportunidad de usar la tarjetas opacas, o robar a manos llenas sin escrúpulos?.

¡Necios!: " Esta misma noche te reclamarán el alma; las cosas que preparaste, ¿para quién serán?".

Pero,descuidad, todo estos están convencidos que "están hechos para este mundo".

20 comentarios:

  1. Bueno, Suso, hay un montón de gente que no cree que haya otro mundo y que, sin embargo, cree que debe pasar por éste dejándolo un poco más hermoso que cuando llegó. Y a eso dedican si vida. ¡Son grandes poetas que hacen el Reino de Dios sin saberlo! ¡Qué tíos!

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  2. No lo tengo muy claro: sin trascendencia, la que sea, me resulta muy difícil qué sentido tiene la moral del derecho, la constitución, y esas cosas.

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    1. A mí también me resulta difícil entender sus motivos, pero sí que hay gente así. Yo tengo un ejemplar en casa que dice que lo hace por la belleza...

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    2. Hace unas semanas, en una entrada se hablaba de que, cuando uno ama de una manera muy intensa, deja de plantearse si tiene fe o no, no porque no encuentre respuesta, sino porque se olvida de la pregunta como quien se olvida de pagar facturas. Esto es así porque la trascendencia no consiste en creer, sino en amar, y es preferible estar ya en una trascendencia amando que aspirar a una trascendencia creyendo. Como también se decía en las entradas de hace unas semanas, cuando alguien muere amando muy intensamente muere sin miedo, porque no se preocupa de lo que va a ser de él sino de lo que va a ser de los demás: el miedo a la muerte no se vence estando convencidísimo de la inmortalidad del alma (aparte de que no sabemos qué significa eso), sino amando. De ahí brota la belleza, como dice C. S. (aunque hay que precisar que la belleza siempre viene por añadidura y nunca se la consigue, o si la había se la echa a perder, cuando se la busca por sí misma). No se trata de si creemos en Dios, sino de si estamos con Él. Por eso sucede que hay personas que están con Dios sin saberlo, y hay personas que, estando convencidísimas de que creen y profesando a gritos su fe, en lo más profundo son ateos.

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  3. Yo creo que todo el que es consciente de su dignidad y su conciencia, como consecuencia lógica, desea contribuir a un mundo mejor. Y el hacer el bien a cualquier nivel es recompensado con felicidad y paz. Esto también lo saben los que no creen en el mas allá. El ser humano es el mismo crea o no en el mas allá.
    Alivio

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  4. Se puede alcanzar un elevado nivel de convivencia ciudadana en una sociedad laica, aconfesional. Si a esto se le añade la fe en Dios, bien entendida y puesta en práctica, la convivencia mejora. De todas formas, aunque tu vida sea más material que espiritual, salvo que seas un burro, enseguida verás la conveniencia de respetar a los demás y a las demás, las cosas de los/las demás, las ideas de los/las demás, que es justo lo que no hacen los habitantes de esta jungla de corruptos, putas y sinvergüenzas.
    Entre las flores que lleves mañana a Matilla, lleva una de mi parte.

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  5. Suso, sin trascendencia es también posible intentar ser buenas personas. ¿Sentido? Muchas posibilidades: amor, compasión, justicia, la regla de oro: no hagas a los demás lo que no quieran que te hagan a ti, etc...

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  6. Apreciado Suso: Tu planteamiento (no tú) es dogmático e inconsistente desde un punto de vista lógico. Dogmático porque parte de una premisa irrefutable pero no contrastada en su realidad (nuestra trascendencia); e inconsistente porque seguido a contrario, conduce a una conclusión desvirtuada por la realidad más tozuda: no son pocos precisamente los que creen en esa trascendencia y roban a manos llenas, corrompen sin pudor, etc., etc..
    En lo que a mí respecta, no padezco ningún conflicto - ni moral ni de ningún otro orden - por no creer en absoluto en el más allá y hacer todo el bien que puedo (con yerros constantes, por supuesto) en el más acá. Abrazos.

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  7. Suso entiendo tu argumentación, porque, en mi caso, creo que sin la Fe, sería capaz de cualquier cosa, ya que no tendría que rendir cuentas ante nadie.

    Sin embargo, el ser humano, hecho a imagen y semejanza de Dios, aunque no sea creyente, tiene en su naturaleza la capacidad de amar y de seguir a su corazón y puede experimentar en su interior que siendo "buena gente" vivirá más feliz.

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  8. Los ideales son todos trascendentes. La belleza también. No se puede hacer nada sin lo trascendente. Pero si nos llamas necios, capaz que no queramos escuchar el resto del discurso, jajaja
    Li

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  9. No lo veo así comparando paises y sociedades. Precisamente si tienes claro donde terminan las cosas resulta inaplazable tu proyecto vital (para lo bueno también).

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  10. Lo cierto es que la caridad cristiana no se fundamenta en razones filantrópicas, sino en que Dios es nuestro Padre, los demás hombres nuestros hermanos y en ellos vemos a Cristo. Los cristianos integraron a los marginados del imperio romano (el marginado de entonces estaba realmente marginado, no se pueden identificar con los marginados de ahora), lo que no se hizo antes habiendo descubierto ya el concepto de ley natural y el deón, y después de haber discutido los filósofos sobre el honestum y lo utile.
    Los cristianos se fundamentaron en los estoicos, pero tuvieron que cambiar muchas cosas para hacer una antropología del hombre como imagen de Dios. Si no crees en Dios no puedes participar de esta antropología: y yo os digo más, amad a vuestros enemigos, poned la otra mejilla... cambio del nosce te ipsum por el attende tibi ipsi et doctrinae.
    No creo que sin el cristianismo hubiésemos llegado hasta aquí.

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    1. Ya, Harry. Es cierto: La fe cristiana creó una cultura cristiana a la que también pertenecen los que no creen en el Mas Allá. Pero hay quien toma la antropología y no la fe, y, sin esperar premio alguno, también hacen su parte

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    2. No creo que lleguen a las mismas conclusiones. Ni siquiera los judíos llegaron tan lejos (¿y quién es tu prójimo?, les preguntaba Jesús: allí estaba el quid de la cuestión, no solo en amar al prójimo o cumplir la regla de oro).
      Estoy de acuerdo en que hacen su parte. Ahora bien, no lo hacen sin esperar premio alguno. El premio, aunque solo sea la satisfacción de estar haciendo lo correcto, está implícito en las buenas obras.
      Los cristianos tampoco distinguimos al hacer una buena obra si nos motiva el premio, el castigo o la satisfacción de creernos mejores.
      Llegar a aquello de "no me mueve mi Dios para quererte el cielo que me tienes prometido ni me mueve el infierno tan temido para dejar por eso de ofenderte... mueveme tu amor, de tal manera que aunque no hubiera cielo yo te amara y aunque no hubiera infierno te temiera" es muy difícil.

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    3. Yo no lo sé, Harry. Pero parece que la pregunta es: "Venid aquí, benditos de mi Padre, porque tuve hambre y me disteis de comer, tuve sed y me disteis de beber..." Y parece que la gente se sorprende de haber hecho esas cosas: "¿Cuándo hicimos nosotros eso?" Así que hay mucha gente que hace todo eso por los demás y que no tiene ni idea de que lo hace por Dios. Luego se hablaba de unos que se creían muy guais y no eran recibidos en la fiesta. Yo deduzco de esto que la fe no es cuetión de creer en el más Allá, ni en dogma alguno, sino de creer que el amor verdadero es una necesidad del hombre y de ponerlo en práctica.

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  11. Li: somos más bien necios (nos lo llame Suso, que en mi opinión no lo hace) o no...
    Ahora, si tu piensas que no eres necio/a... complimenti!
    Picapleitos

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  12. Inicialmente las personas que se cruzaron en mi camino que mas se me asemejaban a Cristo, a un modelo de amor, de generosidad, de misericordia y de hacer el bien no eran religiosas ni educadas en el catolicismo. Esas personas despertaron en mi mas deseos sinceros alegres y espontáneos de hacer el bien que ninguna otra persona en el ambiente católico que me eduque me habían despertado.
    Luego, mas adelante he buscado y encontrado esas personas que inspiran y que tienen la fe en la que yo me eduque.
    Mi experiencia ha sido del revés.
    Alivio

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  13. Suso entiendo tu argumentación, porque, en mi caso, creo que sin la Fe, sería capaz de cualquier cosa, ya que no tendría que rendir cuentas ante nadie.

    Tu no tienes hijos, padres, pareja, amigos, hermanos por no hablar de semejantes, verdad ?

    Se de muvhos que por esa afirmacion hueca han dejadonde creer. Creony soy bueno por el premio, sino ..... Quien sabe.

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  14. Los seres más ridíuculos de este planeta siempre han sido los que dicen y piensan: “Porque tengo FE, que si no, me follaba ahora mismo a 900 millones de chinas y me cargaba de un guantazo a otros tantos milllones de moros”

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  15. No lo vemos igual. Estamos hechos para este mundo, para esta Tierra, que es hermosa, y para las personas, que, aunque a veces la experiencia parezca negarlo, son seres infinitamente valiosos. No hay en todo el universo nada más hermoso que la Tierra, nadie más bello que un ser humano sano desnudo, nada más bueno que una persona que quiere amar a las demás personas. Si quitamos los seres humanos, ¿quién amaría en la Tierra?

    Es por amor a las personas de este mundo y a los paisajes de este mundo y al amor de este mundo, que debemos amar y respetar a las personas y a sus posesiones. ¿Quien tiene más amor, el que es bueno porque ama a las personas y porque quiere su felicidad, o el que es bueno porque sabe que le pueden pedir el alma y no quiere que le castiguen? Por eso no soy cristiano. Respeto profundamente a los que creen en Jesús, pero, a pesar de que coincido con muchas de sus ideas, no soy seguidor de Jesús, porque de muchas de sus afirmaciones se deduce esta idea tan paulina, tan materialista, tan utilitarista: "Si no hay resurrección, comamos y bebamos, que mañana moriremos" De entrada, comer y beber es genial, mientras uno no se coma el pan del otro, o mientras uno no pierda el control por una borrachera, pero detrás de esta idea se encierra el mensaje de que en realidad hemos de ser buenos para ganarnos el cielo. ¿Qué clase de bondad sería esa? Es bueno el que lo es porque desea el bien de las personas aunque a él mismo no le beneficie en nada. Y es un interesado el que es bueno porque sabe que le premiarán o que no le castigarán.
    ¿Para qué respetar al prójimo? Para que el prójimo sea feliz, para que el prójimo esté bien, porque el prójimo es un ser humano, alguien que un día fue un niño y que es hijo de alguien que le ama infinitamente. Por eso. Por nada más.
    Vinu.

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