sábado, 3 de mayo de 2014

¡¡¡MÍO!!!


 Son poquísimas las cosas que hacemos que valen la pena guardar. Pasa el tiempo, miramos hacia atrás, y nos damos cuenta que el 99,99 % de todo lo que hemos admirado, hecho, amado, es una mierda.

Ni más ni menos: ¡una mierda!.

La mujer que nos hizo perder la cabeza, o el hombre, aquellas poesías, aquellos logros personales, la empresa que llevaste a cabo, tus hijos, las oposiciones que ganaste, el blog que escribes...

No se me olvida la anécdota que la madre de un niño que se llamaba (se llama, supongo) Miguel Ángel, me contó divertida...

Dejó un momento en la bañera al niño y a su hermana de 5 años jugando. De repente la madre oyó a la niña gritar: «¡Mamá, mamá, ven...! ¡Qué asco!». La madre fue corriendo asustada y se encontró entre los juguetes que flotaban en el agua un «zurullo» enorme. Un cagarro. Entonces, la madre,en voz alta y enfadada, dijo: «¡Miguel Ángel...¿y esto?!». El niño cogió la mierda, la aplastó contra su cuerpo y respondió: «¡¡Mío!!». 

Pues eso.

4 comentarios:

  1. La entrada me recuerda que, cuando me aconsejaron dejar el Betis después de varios decenios, me dijeron que tenía "una cuenta corriente en el cielo". La misma mentalidad del "mío". Yo recordaba que cuando fui al Bernabéu (con ocasión de la visita de Juan Pablo II) nos dijo, dio titulares a los periódicos: no se trata de tener más, sino de ser más.
    La palabra mammón en la Biblia está mal traducida. No se trata de tener una cuenta corriente (un tesoro) en el cielo.

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    1. Como canta Joaquín Sabina, sería una desilusión llegar al cielo y "encontrar una sucursal del Banco Hispanoamericano".

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  2. El tiempo…

    «Moneda que está en la mano, tal vez se deba guardar. La monedita del alma se pierde si no se da».

    Eso quiero yo, ojalá, aprender, que el tiempo está para regalarlo y que todo lo demás es una inútil agitación.

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  3. Es incomprensible por qué las entradas de ayer y anteayer tuvieron un huevo de comentarios, y la magnífica entrada de hoy (la del zurullo) sólo uno.

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