Hay días que pesa el alma y los recuerdos. Te sientes solo.
Repasas la vida y sientes que eres el monstruo del doctor Frankestein: un ser incompleto, lleno de cicatrices, mal hecho de serie , que no acabas de entender a tu creador, ni de qué pasta estás hecho.
Esos días ando por Galicia.
Estuve en la cascada do Toxa , en Ézaro, Finisterre, y Muxia..
En realidad, más que a andar salí a capturar el milagro del agua y de paisajes de ensueño. Mi padre me enseñó que uno será siempre joven mientras nunca deje de sorprenderse ante la nueva luz del sol, como si fuera la primera y última vez. Eso es lo que hago.
Estuve en la cascada do Toxa , en Ézaro, Finisterre, y Muxia..
En realidad, más que a andar salí a capturar el milagro del agua y de paisajes de ensueño. Mi padre me enseñó que uno será siempre joven mientras nunca deje de sorprenderse ante la nueva luz del sol, como si fuera la primera y última vez. Eso es lo que hago.
A este gran acontecimiento se añade luego la sensación de que llueva, o haga mucho viento, o suceda algo extraño, que siempre sucede si lo sabes buscar. ¡La Naturaleza tiene tantas sorpresas!.
A mitad de camino como en una pequeña taberna en Fisterre . Me reconcilio conmigo mismo mientras disfruto del aroma del café , el sabor de unas salchichas, o una buena tostada con aceite y unas anchoas.
En este espacio de Tierra Media este mar doméstico de bosques maravillosos, puede ser cualquier otro espacio natural , porque todos los caminos y todos los paisajes se parecen a otros, si así los deseas.
En este espacio de Tierra Media este mar doméstico de bosques maravillosos, puede ser cualquier otro espacio natural , porque todos los caminos y todos los paisajes se parecen a otros, si así los deseas.
Para mí todo será una aventura. El recuerdo de quien fui, el malo, y el bueno. El corto, y el espabilado. El tímido, y el pasado de vueltas. El monstruo del doctor Frankestein, y el hijo de un Dios que parece que aquí me acaricia el pelo.
Placeres sencillos, valores universales, un marzo más que se irá hacia el fondo de la memoria.
Nuestro ser es un acontecer, nos vamos haciendo en el tiempo. Siempre nos acompaña la finitud y nuestro horizonte, limitado por el lugar del camino en que nos encontremos.
ResponderEliminarAfortunadamente, la conciencia también se va haciendo y nos damos cuenta de cosas que hicimos cuando deberíamos haber actuado de otra manera, aunque ahora no podamos juzgar correctamente porque esas situaciones están detrás del horizonte y no las vemos.
Kant dijo que lo único absolutamente bueno es una buena voluntad; otro dijo que el camino al infierno está empedrado de buenas voluntades.
Yo pienso que la bondad y el buscar siempre lo correcto es los que nos ayuda a mejorar interiormente, que es lo más importante.
Un chorro de aire fresco en la cara, un atardecer pintado al óleo, la arboleda que te enseña las leyes de la paciencia.
ResponderEliminarY un clamoroso silencio polifónico.
Rotundo.
Como si la Naturaleza fuese la Orquesta Sinfónica de Berlín pegando trompetazos.