sábado, 20 de mayo de 2017

EL AMOR QUE HACE LLORAR.

Los hijos es un libro de memorias familiares de Gay Talese. Es una  estupenda narración en la que Talese habla, sobre todo, de sus abuelos y sus padres, pero también de algunos hermanos y primos más cercanos a sus padres. 

Hay una escena maravillosa , como cuando el padre del autor, Joseph, que era un niño aún pero ya trabajaba en el taller de sastre de su abuelo, Domenico, este le riñó fuertemente:

«Joseph levantó la mirada y le interrumpió.

—Abuelo —suplicó—, ¡ha sido un error! ¡Ha sido el primer error grave que cometo! No he sido insubordinado. Simplemente no me he dado cuenta de que los pantalones estaban escondidos debajo de la tela que estaba cortando. Ha sido mi primer error después de muchas cosas buenas que he hecho y que nunca me has reconocido —ahora hablaba más fuerte, y aunque era consciente de que nunca se había mostrado tan directo con su abuelo, siguió con desesperación—: ¡Nunca estás contento! Nada de lo que hago es bastante bueno para ti. Siempre eres estricto y severo conmigo —ya sollozando, Joseph añadió—: Lo que pasa es que no me quieres...

Su abuelo permaneció en silencio. Esperó varios minutos a que Joseph dejara de llorar. Cuando habló, lo hizo con una voz totalmente desconocida.

—Te quiero —dijo con un tono más comprensivo de lo que Joseph había oído nunca—. Pero todavía no eres lo bastante mayor para comprender este amor. Confundes la crítica con la falta de amor. Pero es todo lo contrario. La gente que critica se preocupa por ti. Quieren que mejores. La gente a la que no le importas no tiene puestas grandes esperanzas en ti. Te aceptan como eres. Dejan que te relajes. Quieren que te conformes. Quien no te quiere —concluyó— te hará reír. Quien bien te quiere te hará llorar».

Me emocioné. Me llegó muy dentro este cuadro. Yo también tuve la sensación de que mi padre no me quería. Tardé décadas en descubrir que " el amor hace llorar".

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ESPACIO RADICAL : RETÍRATE A LOS BOSQUES.

4 comentarios:

  1. Pues yo no estoy muy de acuerdo con el abuelo. Tomo partido por el nieto.
    El abuelo aplica un principio general sin tener en cuenta las necesidades de cariño del nieto reprendido. Es muy fácil aplicar principios generales sin tener en cuenta que el chico es una personalidad muy sensible. Los sentimientos de rabia incubados por Gay ("nunca estás contento") estallarán tarde o temprano porque este chico no puede fiarse de sus propios sentimientos. Él será la persona que su abuelo quiere, pero no desarrollará su propia personalidad.
    También me siento identificado con el pequeño. En el Betis muchas veces me sentí así. Nunca estaban contentos. Quizá mi error fue buscar la aceptación del entorno, pero ¿no es esto lo que busca un adolescente?

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  2. Ayer fue la fiesta de graduación de mi hija Pilar.
    Lloré como una magdalena porque me acordé de todo lo que he tenido que luchar para que ella acabe el bachillerato.
    Desde la forma en que vino al mundo ( diez años de fecundación y cuatro ruinas familiares para poder pagar los caros tratamientos médicos), Las dificultades para poder acceder a un colegio concertado ( falsificar documentos y romper principios para conseguir una plaza enfrentándome legalmente a una burocracia absurda que penaliza al luchador que curra y gana pasta para sacar adelante a su familia), y el gran reto de una enfermedad llamada anorexia nerviosa ( que nos tuvo tres años entre hospitales, médicos y la parca dando por saco en el dormitorio de una adolescente).
    Después de 18 años de lucha brutal, consigue salir del hoyo y tener la posibilidad de ser feliz.
    Mi hija tropezó con un viejo profesor de matemáticas muy estricto, un hueso.
    Saca un siete y le baja la media. No se sabe si la chica podrá acceder a la Universidad Carlos III por ese siete.
    Después de llorar en la misa, en las fotos, en el refrigerio posterior a la graduación y el coche, me quedé tranquilo. E hice lo que tenía que hacer.
    Busqué al Hermano Luis, el Profe de matemáticas, impopular, tímido y solitario, y le dije la verdad.
    Le di las gracias.
    Con 56 años se que si mi hija llega a alguna meta en su vida, es porque ella ha tenido que aprender a luchar con las circunstancias que le han rodeado desde el minuto uno. Y que ese viejo profesor, más hueso que el esqueleto de un diplodocos, le ha hecho el favor de su vida. Marcarle la costumbre de esforzarse.
    ...
    Eso sí, cuando todo acabó, me tomé un par de gin tónics con el director del colegio Sagrada Familia, y en compañía del Pater nos echamos unas risas que pa qué.
    Porque entre todos hemos sacado a una chica del infierno, y eso, se merece un par de copas.
    Y nos abrazamos como lo que hemos sido.
    Una familia de mindunguis que lo han dado todo por los chavales.
    ...
    Ahora son ellos los que deben comerse el mundo ( felicité a todos y cada uno de los egresados en nombre del gobierno, aprovechando el estreno de un traje y mi cara dura).
    Y teníais que haber visto sus ojos.
    Los chavales, al ser felicitados por un miembro del gobierno ( se comentaba en el colé que yo era subsecretario o embajador, no sabían que en realidad soy un cara dura), esos bachilleres, recién terminados sus estudios, se venían arriba.
    Exactamente donde hay que estar con 18 años y el alma en el bolsillo.
    ...
    Donde las estrellas.

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    1. Cuanta razón tienes y que pillo eres!!! No te olvides de enseñarle a tu hija como serlo !

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  3. Tu escrito llega el día en que mis primos y yo nos reunimos para hablar y conocer la vida y milagros (te aseguro que los hay) de nuestros antepasados. A punto he estado de colocar tu link de este post pero no sé si lo entenderían. Gracias suso por alimentar mi conocimiento de las realidades más palmarias y darme argumentos para guiar y conducir situaciones difíciles que ya sea en mi propia vida o en la de un familiar se dan cada dia

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