Amigos son los que tienen la mejor versión de uno mismo. Y uno, desde luego, he tenido grandes versiones de unas cuantas personas a las que he querido mucho, y bien. Con algun@s de esos amig@s confundí la amistad. Y yo también he confundido a otras. Hicimos un dios de esa amistad , y después no les perdonamos que no lo fueran.
Por eso sé que tú fuiste mi amigo, y que me quiso y me respetó hasta el final. Yo también te he admirado, te he querido y te he respetado siempre. Después en la vida uno ha elegido su opción y tú la tuya.
Hoy sé que ya se trate de un hombre, de una doctrina, de una institución, de una pasión que debes abandonar al borde del camino para seguir tu propio destino , procura evitar al retirarte toda apariencia de vulgaridad, o de traición.
Despídete con la máxima delicadeza. Probablemente, esas persona, esas gentes, esos compañeros de viaje, sea la última vez que lo veas.
Ese amor, esa alma amiga, ese maestro, cuyo umbral no volverás a franquear es a quien debes saludar y despedirte con el mayor cariño y respeto.
No todo el mundo piensa así, pero así debes comportarte.
Algunos al que se va para siempre le profetizan: "No encontraréis la felicidad fuera de vuestro camino. Si alguien se descaminara, le quedaría un remordimiento tremendo: sería un desgraciado. Hasta esas cosas que dan a la gente una relativa felicidad, en una persona que abandona su vocación se hacen amargas como la hiel, agrias como el vinagre, repugnantes como el rejalgar".
Además de no ser verdad, tú despídete sin miedo y agradecido.
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