VOLVIENDO A CASA.

domingo, 31 de agosto de 2025

No se me olvida la mañana que uno muy principal que había dejado la opus me dijo que la razón de haber abandonado la institución fue que sentía había cambiado mucho su " configuración institucional". Ya no era lo que fue.


Me hizo  gracia el eufemismo " configuración institucional" para lo que en realidad era que se estaba trajinando a su secretaria. Cosa que sabía todo el mundo. O sea, que la configuración institucional era ella.


Me preguntó por mis razones.


Decidí dejar la obra el día que vi que yo era el culpable de mis problemas , del hoyo profundo en el que había caído. No podía echar la culpa a " son cosas que me pasan". Porque fue en Valladolid donde descubrí lo lejos, lo muy perdido y roto que estaba. Que era yo el que avivaba rescoldos , en otras personas, mal apagados, que sabía despertaban fuegos que no había manera de controlar. Yo el que besó a una mujer en la sacristía del colegio, yo  el que acaricié la palma de una mano al entregar un folleto, yo el que guiñé el ojo y piqué a ver qué pasaba. No paraba ante nada ni ante nadie. Me daba igual todo. Me sentía muy mal, muy perro, muy lejos de todo. Perdido en el desvarío. Atrapado por una sexualidad enfermiza.


Y decidí dejar una institución. Allí no tenía cura. Y, por lo menos, de perderme, lo haría solo.


Cuando el auténtico Sátur me dijo que me veía a los sesenta años en la barra de un puticlub, solo y alcoholizado, contando mis batallitas, pensé que tenía razón. Yo también me veía así. Salí muy, muy perdido.


Antes de irme llamé a todas las mujeres con las que tenía lío y me despedí. Les comenté que volvía a empezar. 


Después llegué a  Zaragoza buscando refugio en la familia. Podía haberles mentido y decir eso del "cambio de la configuración fundacional", pero les conté la verdad. Toda la verdad. Mi padre no quiso terminar de escucharme y me dijo " me das asco".


Después llegó un año donde cada viernes viajaba desde Barcelona a Valladolid a estar con Manuela. Y cada domingo vuelta al trabajo a Barcelona.


Creo que no he sido más feliz en mi vida que en aquellos años, con aquella mujer, en esa casa, con esas expectativas nuevas.


Imagino al Odiador salivando y frotándose las manos con lo que está leyendo. Pensará que me ha dado un brote de ego narcisista.  Espero no le dé por comentar hoy: no creo que me desprecie más de lo que yo lo hago por mi.


Además, le voy a contar un secreto: uno puede sentirse perdonado por Dios, pero cuesta  mucho perdonarse a uno mismo. Eso aún no lo he terminado de conseguir.


No. De un tiempo a esta parte el Barullo ha subido en número de lectores. Llevamos un mes en una media de 2.500 lectores diarios. Y, aunque aquí se asoma gente muy maja, y buena, también pienso que habrá - de ellas y de ellos- personas que estén metidos en líos como los míos, y peores. Porque la vida es así. Es como los cables de los cascos, que te das la vuelta para hacer cualquier cosa regresas y ¡coño, allí están enredados , ¡y no sabes cómo!


Y les diría que nunca es tarde para volver a empezar, pase lo que pase, estés como estés. Que si ahora mismo te postras y rezas " ¡ por favor, Dios mío!, sácame de de esta!"- no sé cómo, porque no lo sé- pero saldrás. Dios lleva tiempo esperando y viendo tu dolor, tu soledad, lo lejos que has llegado, y diciendo " a ver cuando sienta la cabeza, a ver si se entera, a ver si se acuerda de quién es"


Basta que Le pidas ayuda. Y que seas muy sincero contigo mismo, que no vayas haciendo el gilipollas con eso de la "configuración fundacional". Eres tú el problema. 


- Es que yo no creo, no tengo fe. 


Pero tienes conciencia. Sabes que no está bien lo que haces. 


Estás muy lejos, pero si quieres, verás que todo tiene arreglo. Estás muy cerca de la alegría, y de la paz.  Vuelve a casa. Depende de ti.



43 comentarios

  1. Hola Suso! Siento mucho lo de tu enfermedad. Todos mis ánimos y oraciones. Ya de regreso del veraneo y reencuentro con el barullo. Cerdaña que conoces tan bien. Mucha gente que te quiere y te recuerda con mucho cariño. Abrazo fuerte!

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  2. Esta entrada te ha quedado guapísima. Gracias y sigue por favor.

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    1. ¿Guapísima?

      Yo no la veo así. No es nada ejemplar.

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    2. Bueno, no es comparable a Las Confesiones pero se dan un aire.

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    3. Guapísima por el valor del testimonio de das. A mí me ayuda. Está bien traído lo de Las Confesiones.

      Tengo una pregunta. Tú padre reaccionó diciendo esas palabras en caliente. Pero ¿luego?

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    4. Fue el mejor padre, el mejor amigo. Me acompañó en todo y disfrutó de mis aventuras profesionales, que le entusiasmaba que le contara. Quiso a Manuela muchísimo.

      Fue un gran padre. Le añoro muchísimo. Si repasas el blog sale muchísimo.

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    5. Me encanta esta historia. Suso, yo creo que hay mucha belleza en tu vida ✨. La belleza no está solo en llevarlo todo de manera ejemplar, sino también en esa mezcla de miseria y gracia que tú transmites tan bien. A mí me ayuda porque es auténtico: hablas desde lo que eres, no desde una fachada. Y eso toca mucho más que cualquier ejemplo perfecto.

      Perdona si te duele en algo mi comentario. Mi intención es precisamente la contraria.

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  3. Lo de la "configuración institucional" será un eufemismo, pero que la secretaria de la que hablas valía un imperio y estaba como un tren era una realidad irrefutable. Hasta los gatos se giraban la cabeza cuando se cruzaban con ella (y le decían: miau).

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    1. Vale, pues dilo así, y no vengas con excusas de profe chungo de IESE de barato.

      Enseña la foto de ella y di " fue por esta razón".

      Todo lo que sucedió allí deja muy mal a la IESE y al tío. Fue una mierda. Pero así.

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  4. Qué poco saber estar contar estas intimidades que no interesan a nadie. No me extraña que haya gente que te la tenga jurada. Eres un mini Maciel que corrompe todo lo que le rodea.

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  5. Vamos, que todo lo reseñable que has hecho en tu vida es ser un picha floja de cuarta regional, mendigando sexo con señoras ociosas. Menudo currículum de mierda.

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    1. Pues sí. Exactamente así: un currículum de mierda.

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    2. Hombre , Maciel no cambió, yo sí.

      Por cierto, lleva usted varios días escribiéndome sobre si he visto la serie de Maciel. Pero dando la brasa. No se lo publiqué porque sabía que era pregunta trampa de rata malaya.

      Veo que tenía razón. Me estaba usted esperando.

      Es muy corto para este Barullo.

      Adiós.

      Se ponga como se ponga , entre Maciel y yo hay un abismo.

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    3. Suso, a mí me ayudó una frase que se la escuché al mejor profesor que tuve en la universidad que decía algo así como "si te mean encima, tú cómo si oyeras llover".

      Es por otro lado una frase conocida pero oída por un catedrático que admiraba me quedó esculpida en el alma.

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  6. Una persona, una historia. Se cuenta y cada no entiende según lo que haya cargado en su mochila. Creo que la entienden (o disculpan) solo los que en su mochila dejaron lo esencial: tabaco por su el amigo fuma, agua, algo de comer y papem higiénico. El pasado y los prejuicios no tienen sitio. Buen domingo soleado.

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  7. ¡Cuánta razón tienes! Yo mismo he estado y estoy en líos de esos, aunque a menor escala.
    Pero afortunadamente con “seny” y, a la fin, sin perjudicar a nadie, esa ha sido mi única norma.
    A mi modo de ver, todos ganan. Digamos que viviendo en un bonito equilibrio.
    ¡Qué dificil es expresarlo!

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  8. La entrada de hoy ha despertado en mí muchos recuerdos y consideraciones, Quiero compartir un par, sin un orden particular y sin profundizar demasiado.

    El primero es la escena final de la película "The Blues Brothers", que contiene un mensaje visual muy poderoso: mientras Jake y Elwood interpretan Jailhouse Rock en prisión, aparece en la pared un gran letrero que dice "It’s never too late to mend" (“Nunca es demasiado tarde para enmendar”). Una gran verdad en una película ligera que, sin embargo, transmite mucha esperanza.

    El segundo recuerdo es de mi padre que, desde que mis hermanas y yo éramos pequeños, incluyó en su tarea educativa la frase de Terencio: "Homo sum, nihil humani mihi alienum puto". Otro concepto lleno de esperanza, pues en realidad no hay nada nuevo bajo el sol y lo importante es intentar comprender (incluido comprenderse a uno mismo), reparar cuando sea necesario, perdonar, empezar y volver a empezar.

    Pero una cosa es hablar en abstracto, y otra hacerlo en concreto. Aunque tuve bastantes conversaciones profundas con mi padre —sobre todo a partir de los 35 años, cuando empecé a verle más a menudo—, nunca le hablé de hechos muy personales, crudos, íntimos, oscuros como lo hizo Suso con su padre. Intuyo que a mi padre le habría dolido; sé cómo hubiese querido reaccionar, pero no cómo habría reaccionado de verdad.

    Hace unos días le hice a Suso unos comentarios en privado sobre el rumbo que había tomado El Barullo últimamente. Le decía que, a pesar de los odiadores —o quizá gracias a ellos—, el blog había tomado un “rumbo bastante sobrenatural” ( dicho así suena mucho a "tronco oloroso"). Me contestó que en su vida nunca le había importado contar lo malo que había hecho, y que por lo tanto ahora tampoco le importaba contar las cosas buenas. Su observación me impresionó mucho y subrayó una diferencia entre él y yo.

    Porque aunque me tomo la vida con bastante ligereza, y a menudo encuentro aspectos cómicos incluso en lo que la mayoría considera tragedias (no tengo inconveniente en hacer el ridículo), tengo una total reticencia a hablar en público de aspectos muy íntimos y concretos de mi vida: no solo de los “malos”, sino también de los "buenos". Eso lo hago —no siempre con comodidad— con mi mujer y con unos pocos amigos cercanos, pero siempre “one-on-one”, cara a cara.
    No sé si se trata de pudor, de un resto de mojigatería, o quizá de simple falta de valor.

    Muy acertada, en este sentido, la observación del Anónimo que recordó las Confesiones de san Agustín. En efecto, Suso parece jugar en la liga de Agustín: no tiene empacho en desnudar su vida, lo oscuro y lo luminoso, con la misma naturalidad con que otros cuentan una anécdota de fútbol. Yo, en cambio, pertenezco a otro club mucho más modesto: el de los que leen esas confesiones con respeto y admiración… pero también con la íntima convicción de que, si llegase mi turno de confesarme públicamente, optaría por citar a Terencio, poner cara de filósofo y salir corriendo antes de entrar en detalles.

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    1. La razón de esta entrada, que sé que ha causado cierto escándalo en lectores ( cosa extraña , pues son cosas muy sabidas) es , como bien afina Guiri, que se vea la acción de la Gracia en este pobre hombre.

      Es mi manera de dar gracias. Porque, efectivamente, me da igual que me saquen cantares por las cosas malas e incomprensibles que he hecho en mi vida, pero quiero dar testimonio de las buenas que Dios ha hecho y, encima, sin que uno haya hecho gran cosa por su parte.

      Y me da igual que se entienda o no. Tengo prisa porque se sepa que todo es "mucho más sencillo" - frase que me dejó en el watsap Joan Valls antes de morir, y que Dios es muy bueno.

      Los qué dirán a estas alturas, no me importan nada. Soy el décimo leproso que vuelve agradecido y loco de contento.

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  9. Buenas Suso, no sé porque logaritmos o que me saltó esta canción
    https://youtu.be/H8k7fu-h6g4?si=PgqmBPVsQ2cMA-qY
    Quisiera saber tu opinión
    Puede ser un himno para lo barullos
    Y ya sabes reza por mi

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  10. Yo siempre digo lo mismo.
    En el Betis no existe el discernimiento vocacional. El número por el número, y luego pasa lo que pasa.
    La continencia no es lo normal, es un don de Dios que lo da a quien quiere; no a quien quieran los directores.
    "Mejor es casarse que abrasarse", dice San Pablo que más claro el agua.
    Hay responsabilidades compartidas por aquellos que te llevaron por un camino que no era el tuyo.
    Y encima viene un director y te dice que "t(m)e veía a los sesenta años en la barra de un puticlub, solo".
    ¿Dónde estabas cuando te lo dijo? Más solo que la una, con unos directores que querían que marchases a Chile o Argentina (este era el menú, si no recuerdo mal).
    A nadie se le metía en la cabeza que el celibato no era lo tuyo.

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    1. Ese director es el Satur autentico?

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    2. Sí, pero no he conocido hombre en mi vida que me quisiera tanto como él.

      Viene conmigo. Mi corazón le lleva.

      Un grande. Pero esa es otra historia.

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    3. Una historia jamás publicada?

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    4. Así, nunca. Puede buscar. Sé lo que escribo.

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    5. Ok. Me refiero a si está contada la historia del auténtico Satur eh?

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  11. Ostras con el odiador, ese seguro que tiene el armario cerrado con siete cerrojos y dentro un cierto olor a podrido.
    Yo me fui de la institución hace muuuuuchos años, y la razón fue por todo lo contrario de Suso o el del IESE. Me cancelaron la espontaneidad y me castigaron la imaginación. Me encontré entre paredes de acero imposibles de traspasar mientras veía que el mundo seguía avanzando y yo estaba atrapada.
    Esa es mi experiencia. No la de todos, ahora lo sé. Durante muchos años seguí haciendo las mismas cosas que en la opus, intentando vivir como”cristiano corriente” con un marido y varios hijos. Imposible. Había que tomar decisiones y me dolían. Por ejemplo: un hijo que en su adolescencia no quiere ir a la misa dominical. Y me preguntaba que es peor, que el chaval decida no ir o que sus padres le obliguen abusando de autoridad.
    Ahí empezó a caerse todo poco a poco. Y me estoy redescubriendo. Estoy aprendiendo a quererme como soy y a querer a los demás como son. Aunque a veces sea complicado.
    Mi padre nunca se interesó de por qué lo hacía dejado. Y nunca se pondrá de mi lado. Para él la institución es intocable. Por encima de sus hijos. Triste.

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  12. Guiri, tu comentario resuena muy mucho en mí. Me sucede exactamente lo mismo. Hay cosas personales, íntimas, que sólo las comparto 1to1, con personas de mi máxima confianza, y no de forma muy frecuente precisamente. Ahora voy a generalizar... creo que esta es una tara, una particularidad, una característica (llámalo como quieras) que tenemos muy acusados los que dedicamos nuestros mejores años en los Cuerpos Especiales (es la misma soledad que la de Rambo, yo ya me entiendo). Insisto, he generalizado, pero sé que a muchos veteranos del Vietnam les sucede. Por cierto, muy importante que parejas, mujeres, esposas conozcan este tatuaje invisible. Es muy conveniente, para que no les explote la cabeza. Feliz inicio de curso, amigos!

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  13. https://youtu.be/H8k7fu-h6g4?si=UX6Feh-r9qOTgCQ8

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  14. Lo ideal sería estar arrepentido por haber sido demasiado puro, pero bueno Dios ama a todos por igual.

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  15. Me ha tocado ir a visitar algunas cárceles en los últimos meses. Hoy subo en el facebook una foto de la cárcel de Colón en Panamá. La sociedad en general quiere olvidarse de que existen los delincuentes, y en países cómo México, Panamá (por no hablar de otros países centroamericanos), existe una idea generalizada de que a los que rompieron con la sociedad mejor encerrarlos y tirar la llave. La idea de la reinserción social, que ciertamente es muy difícil de lograr, me cuentan que tiene un raíz más católica que puritana. Los gringos aprueban la pena de muerte en muchos casos y no piensan que alguien pueda repensar su vida, y reintegrarse como un ciudadano que contribuya a qué las cosas estén mejor. Me toca hablar sobre Derechos Humanos con militares y fuerzas de seguridad en uno de los países más violentos del mundo. No es sencillo tratar de empujar hacia un mundo en el que los funcionarios públicos se comporten con institucionalidad, cuando pueden perder la vida en cualquier momento, en manos de criminales a los que han deshumanizado, o que en muchos casos están drogados. Sin embargo, creo que no hay otro camino para impulsar una sociedad en el que la convivencia prevalezca, o sobre salga algún día. Las cárceles, sus condiciones, reflejan las sociedades que las acogen.
    Si eso pasa en la institucional, cómo no va a pasar en lo personal, cuando las supuestas faltas fueron contra la forma de entender la vida. Sigue existiendo mucho fariseo y mucho puritano que se llama católico desubicado. Mando abrazo cariñoso Suso. Ahora me voy a cambiar y a llevar a mi hijo y sus amigos a ver un partido de fútbol.

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    1. Muchas gracias, amigo. De verdad.
      Muy potente lo que ha escrito

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  16. Dios nos da todo y nos deja abiertos al daño para que nos vayamos enganchando a lo que es bueno.

    Eso tambien nos sirve para no creernos propietarios de los dones recibidos.

    Que duela lo que no hemos hecho bien es muy bueno. Dejar que esos recuerdos ahoguen lo que hemos intentado hacer bien…

    Llamaste, dijistes lo que querías decir, y cambiastes

    Qué más quieres? 😘

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    1. Sólo quiero dar gracias y que se sepa que Dios siempre está cerca, esperando.

      Y que lo sepa todo el mundo.

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  17. Bacalar se escribe con "Ba" de Bauprés.

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  18. Suso, para empezar dispense la frivolidad de este comentario.

    Dios le habrá perdonado y todo lo que usted quiera, pero los pecados que nos cuenta a mí parecen muy inquietantes por cuanto demuestran que no existe ningún entorno seguro en este mundo.

    Me explico. Un señor piadoso, un hombre de orden, de Valladolid de toda la vida, decide llevar a sus hijos al colegio del Opus Dei de la ciudad y, al final, se le follan allí a su mujer. Y encima un numerario. Es algo que me rompe los esquemas y me causa gran quebranto.

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    1. Su comentario no es ninguna frivolidad. Su escándalo, tampoco.

      Pero las cosas fueron así. Podría añadir algún detalle que podría quebrantar más su estado pero, ¿para qué?

      No tengo nada que añadir. Las cosas fueron así. Y de verdad que lo siento.

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    2. No existe ningún entorno seguro. Las personas cometemos errores, y ello implica que no existe ningún entorno seguro.
      Y, aunque a algunos les parezca imposible, ningúno de nosotros está libre de sospecha; podemos meter la pata, por debilidad, porque se nos va la cabeza, porque siempre la hemos tenido ida, porque nuestra mente se descalibra... No queda otra que vivir con la inseguridad, y aprender a ser felices con ella; sobretodo si esa inseguridad depende la decisión de terceras personas. En esto que explica Suso, no actuó solamente él, había una mujer que tomo una decisión, o se dejó llevar o... Hay personas que viven como si la perfección fuera lo normal, pero no lo es, ni siquiera en los entornos que divinizan la perfección; y las personas que no somos perfectas; y las personas, que no somos perfectas, necesitamos una salida; no digo que la merezcamos, digo que la necesitamos. Y tenemos un Dios que lo ha merecido por nosotros; y tenemos un Dios que ama a los imperfectos tanto como a los perfectos. La cual cosa trae de cabeza al hermano del hijo pródigo.
      PRISCILIANO

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    3. Hoy me escribí con un buen amigo. Está muy enfermo. Tiene una cabeza particularmente ordenada. Un sentido común poco común. Un corazón que sabe querer.

      No entiende que me exhiba tanto. Pero me conoce y respeta. Y , en medio de una larga conversación entre enfermos , me ha escrito:

      " No olvides una frase de Jesús que a mi particularmente me mueve y me llega muy dentro: mi delicia es estar con los hijos de los hombres".

      Hijos que somos nada, un desastre, llenos de imperfecciones , de errores, de pecados y de mierda. Pero, a pesar de eso, sus delicias son estar con nosotros.

      Y tampoco olvides que hay otro ser que sus delicias son que no te sientas querido, ni perdonado, y que desconfíes del amor de Dios.

      Y ese es el diablo.

      Desprécialo.

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