Es posible que seas de esos que dicen
no tener Fe. Comienza imitando a los que la tienen. Me refiero a los
de verdad – es muy fácil identificarlos. No es verdad que no crees
en nada que no se pueda ver o tocar. Otra cosa es que no has hecho
nada por desarrollar la Fe.
No te dejes impresionar por otras
personalidades, por muy fuertes que parezcan. No hagas un dios de
nadie , porque un día no le perdonarás que no lo sea: son, todos,
unos perfectos gilipollas.
Sé puntual. Una manera de serlo es
llegar con quince minutos de antelación.
No pienses en loe beneficios de lo que
hagas.
No reacciones a lo que digan de ti,
sea bueno o malo. Y mucho menos si te enteras por terceros: que les
den.
Lo que tienes trátalo como si te lo
hubiesen regalado, y lo que no tienes, como si fuera tuyo.
No te quejes. Sé durill@ , coño, que
hay gente que está peor y no dice nada.
No te distingas por tu apariencia, dice
muy poco de ti, ¡o mucho!.
Paga lo que consumas. No debas nada.
Desde el DF todo en orden tras el temblor.
ResponderEliminarConseguir que se idolatre a alguien infunde en sus seguidores la idea de estar imbuidos de una fuerza sobrenatural invencible: que los guía un caudillo bajado del cielo. "Si el hombre pudiera conocer al prójimo no idolatraría ni odiaría" (Elbert Hubbard; cortesía de Mentes Criminales).
ResponderEliminarEs una técnica de motivación más. Goebbles era un genio en esto:
http://www.grijalvo.com/Goebbels/Once_principios_de_la_propaganda.htm
Consume lo que debas, No pagues nada ;-)
ResponderEliminar