Está comprobado:la mejor literatura amorosa nace de la impotencia, de la misma forma que las grandes aventuras han sido creadas por autores fofos o esmirriados , de poca salud , que no se movieron de su casa.
Evelyn Waught escribe Retorno a Brideshead en medio de la segunda guerra mundial, y se inventa una ficción que lo transporte a mundos de aristócratas decadentes, familias ricas, y manjares de ensueño.
Dante no se casó con Beatriz y por eso ideó la Divina Comedia. Stevenson no fue un pirata, sino un joven de pulmones muy delicados, esa es la razón por la que hoy podemos leer La isla del tesoro.
Cuando alguien es un experto en la cama no tiene necesidad de escribirlo: a lo sumo, como el torero Dominguín, sale corriendo de la alcoba donde se ha jinchado a Ava Gadner a contárselo a los amigos en el bar.
Pero no a un editor.
El aventurero tampoco encuentra tiempo para escribir sus logros porque las está viviendo. Lo miso sucede si comes bien , basta con esperar una buena digestión y dejarse de escribir.
Siempre es un consuelo pensar que Cervantes estaba manco: con su otra mano escribió el Quijote.Y la sordera de Goya habló a gritos en la Quinta del Sordo . Que Tolkien era un hombre muy aburrido, de unas costumbres absolutamente burguesas .
Y, ya que estamos, esta teoría que hoy defiendo aquí explica muy bien muchas de las cosas del Barullo. Aquí estoy en guerra civil contra el olvido, Manueleando la vida que me queda, recordando miradas de mujerres que son tratados de autoayuda.Esto es un bienmesabe, un quéagustito.
A buen entendedor...
Nunca he conducido un camión de 16 toneladas, ni he volado en un hidroavión entre las Isla Vírgenes, ni tampoco he orbitado la Tierra.
ResponderEliminarLa última vez que me lié a mamporros tenía veinte años, y cuando me salto una señal me viene una multa que e cruje vivo.
No llevo la vida de Driver.
Por eso la escribo. Porque la anhelo y necesito soñar.
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Bueno, el follón de los hospitales, la chica de los ojos verdes esmeraldas y las historias de hombres que hacen muchas cosas porque sí, son ciertas.
A veces al escribir ordenamos ideas. Y con un poco de suerte mejoramos algo.
Necesitamos retos para saber si todo esto nos ha servido.
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Yo creo que en parte sí.
Qué carajo !