Sufro viendo a un amigo padecer el delirio de los celos.
Parece amor y, sin embargo, es lo más lejano a estar enamorado. Piensa que su preocupación, sus lágrimas, su dolor, sus exageraciones, son prueba de ese amor.En realidad, sólo expresa una enfermiza preferencia por sí mismo..
En los celos no existen tres personas, ni siquiera dos : sólo una, presa de su enfermedad. Te amo, luego me lo debes todo. Te amo, luego dependo de ti. Los dos tenemos que estar dependientes de nuestra dependencia.
El razonamiento del celoso es interminable. No quiere respuestas, es una espiral obsesiva, una peonza , una yogurtera, un infierno.
Es el niño pequeño que , al ver que su pareja es querida , admirada, o, sencillamente, respetada por los demás, recurre a la pataleta, a los morros injustificados, como moneda de cambio.
El celoso merece la soledad en la que termina.
¿Tan poco crees en tí mismo, en lo que tú eres que haces responsable a tu pareja de tu inseguridad?
ResponderEliminarMientras te preocupas de lo que hace tu pareja,
no te tienes que preocupar, ni te preocupas de lo que tú eres y de lo que tú haces, qué chollo poder ser irresponsable y ser víctima! Ya te vale! Cuando te vas a enfrentar a tu idea de tí y a lo que eres? Hablamos.
Courageous