En Tarragona conocí un urólogo
desconcertante. Desconcertante porque era persona pausada, de modales
exquisitos, muy educado, piadoso y serio. Pero, simultáneamente ,
contaba unas cosas, y de un modo tan preciso y atento, que eran
auténticas barbaridades dichas sin ningún tipo de broma.
Una de las frases que más me
impresionaron, parecía una sentencia, fue “¡si supieras la de
cosas que se mete la gente por el ano!”. Le pregunté por algún
ejemplo, y me contó de un hombre que entró en Urgencias con una
gabardina y al desprenderse de ella le muestra al de recepción
el teléfono de la ducha metido en el culo. Desenroscado del cable,
claro.
De este conté una guardia
donde ingresa un hombre con un pinzamiento testicular severo. Eso,
chicas, duele, y puede ser mortal: un testículo se descuelga, se
trastabilla sobre el otro testículo, y hace horquilla. Mucho fuerte
dolor. Los que han padecido la experiencia dicen que ves cosas muy
raras.
Nuestro médico estaba en
una cena y se desplaza rápido a la sala de espera donde está en una
silla de ruedas el paciente y pregunta que quién es. Le dicen que
el de la silla de ruedas. Cuando llega al pasillo hay dos en silla de
ruedas. Uno de sus ocupantes está inconsciente, y piensa que es él.
Y comienza darle un masaje en los doings , tiene que hacerse manual
el proceso, pues se trata de colocar el testículo rebelde en su
sitio, descabalgarlo.
El paciente despierta, no
dice nada, sólo calla y observa como un tío le masajea los pebrots.
- Oiga- le dice nuestro
urólogo muy serio- usted no tiene nada.
- Nada de qué-
responde.
- Que no tiene torsión
testicular.
En éstas están, y asoma
la cabeza el de recepción y dice...”doctor, ése no es , es el de
allí”.
Lo bueno es que, además,
es que el médico venía vestido de calle, sin la bata. Lo que le
desconcertó más.
- Que te venga un tío
de la calle a Urgencias, te masajee los güevos, y no digas
nada...no sé, no sé.
Había que
escucharle una anécdota de una operación de corporoplastia, que es
cuando el pene está torcido para alguno de los lados o hacia arriba
o hacia abajo. Hay hombres que en reposo la tienen normal pero
empalmada se les tuerce y les causa un problema a la hora de la
penetración, porque o haces el pino puente o ya me dirás tú.
Estos
pacientes tienen que traer unas fotos del pene torcido a fin de que
el cirujano, antes de intervenir, las observe detenidamente para ver
hacia dónde se le tuerce y poder enderezar aquello. En quirófano
luego provocan una erección inyectando una sustancia, para
cerciorarse.
Imagino que
Tomás López Pizpireta (Egg) querrá saber el nombre de la
sustancia...lo siento, desconozco.
Contaba que
ver las fotos era un momentazo, porque tienen que estar tomadas desde
arriba, desde los laterales, de frente... Sin que se vea la cara del
señor, en plan posturita posando en bolas, sino la zona en cuestión
erecta. Sólo el pene. Y, como podéis imaginar, son fotos caseras, a
nadie se le ocurre ir a un estudio para eso ( “me fotografíe la
polla, por favor...) así que ves de fondo la encimera de la cocina,
o el mantel de ganchillo regalo de la suegra, fotos de las comuniones
de los niños, o el espejo del mueble del dormitorio...
Pero un
día observó perplejo en la fotografía una foto al fondo de Álvaro
del Portillo. El pene en primer plano, torcido y eso, y difuso, pero
identificable, el retrato de Álvaro del Portillo..."yo- añadió- al hombre le
conocía, así que le pregunté"...”pero tú, donde cojones te has
hecho esta foto? “.
Nunca lo
averiguó. Ese secreto se lo llevará a la tumba.
Suso, pero por qué le inyectaban una sustancia para conseguir el empalme? Oye, es mucho más sencillo (y más indoloro) empalmar de forma natural, o no?
ResponderEliminarF1
JOTA PUNUTO EFE PUNUTO ERRE PUNUTO ES EL INOMBRABLE
ResponderEliminary ahora que ponemos en google para buscarte? solo "el barullo" salen muchas cosas: tienda de disfraces, cantaores, bares......Si pones "que barullo en la herida" vale porque luego de ver al mono pinchas AQUI y listo!!!! pero con el tiempo...... tampoco entiendo que te hagan cerrar el blog, o no es asín?????
ResponderEliminarGracias. Mi cultura de la blogosfera es justita!!!!
No me han hecho cerrar el blog.
ResponderEliminarNo hace falta ir a Google, Carmen, te puedes guardar la dirección del Barullo en la pestaña de "marcadores" y...¡yatá!
ResponderEliminarMi urólogo (amistades que crea la edad) admite bromas. Menos mal. Que si te tienes que cortar las uñas, que si te dejo no es porque me guste... Y el chiste de aquel que estaba en la bañera con dos palmos de hielo y gritaba desolado... "No han venido., no han venido!!!"
ResponderEliminarPues al final va a resultar que el innombrable te ha vuelto a ganar la partida.
ResponderEliminarUn blog redireccionado "gracias" a sentencia judicial...nivel. Yo me plantearía vender algún espacio para publicidad e ir haciendo caja.
ResponderEliminarCarmen, pon en google barullosusto y te saltas las tiendas de disfraces, el del flamenco y esa cosa del Uruguay, guay, yo no voy, voy...
ResponderEliminarPues, Lalo, no es mala idea eso de hacer caja.
ResponderEliminarMe estoy planteando una colecta para sufragar los 600 leuracos que tengo que ingresar pagar por el innombrable.
¿Qué nombre tiene esa sustancia? Es de sabios preguntar. Menos rollos y más respuestas claras y concisas.
ResponderEliminarEgg
Realmente, en Tarragona podías encontrarte bastante de todo, para mí era demasiado circo,
ResponderEliminarImperial
A un euro por cabeza, mi casi me tocaría poner otro, pagamos los visitadores, que nos mola todo esto
ResponderEliminarAlgún día se reconocerá la labor de Egg en su lucha contra el mal.
ResponderEliminarNo puedo escribir esto sin emocionarme.
Adolfo
la "labor" de egg??? o sea que tocar los cohones es luchar contra el mal, por lo visto...
ResponderEliminarEggrección
ResponderEliminarUn urólogo me comentó el caso de una chica que llegó con la bolita del cambio de marchas en la vagina, que se había desprendido.
ResponderEliminarLo de la foto de Álvaro no está mal: la gente se pone con unas cosas rarísimas.
Blog clausurado y a pagar 600 leuros. Y no le han aplicado el garrote vil de milagro.
ResponderEliminarSr. Susto, búsquese usted a un abogado que le defienda de su abogado.