lunes, 27 de febrero de 2017

FENCES

Ayer  vi  "Fences",  película de  Denzel  Wasington. "Vallas"

Vallas es lo que muchas personas ponen a sus relaciones personales, tanto dentro de la familia como fuera. Y eso es lo que  refleja ésta película. Los obstáculos que nos ponen y ponemos en nuestra vida para conseguir nuestros objetivos. 

Vallas qué tenemos que pasar de una manera u otra para madurar. Vallas qué nuestros semejantes ponen entre ellos y nosotros para que ésta vida sea más difícil de lo que en realidad aparenta.

Narra la historia de un hombre con un ego herido que le ciega  a si mismo y cae más bajo que el barro, pensando por lo contrario que era una especie de hombre sagrado.

Gran reparto, con una Viola Davis que sobresale sobre el mismo D. W. en la mayoría de sus escenas juntos. Nunca he visto a Viola Davis mejor. 

Pero atrevida, real, auténtica, con los pros y los contras que tiene el ir de padre de familia y de persona intachable. Nadie lo es. Victor Hugo estaría orgulloso de esta película. "Todos somos unos miserables". En efecto, eso es.  Igual que "Manchester frente al mar" los protagonistas no viven en el país de las Hadas, sino en el Planeta Tierra.

Hay una línea que separa el amor del temor. A lo largo de esta línea algunos elevan una cerca de respeto.

Troy Maxson es una de esas personas.

La vida no le ha dado ningún motivo para creer que las cosas pueden cambiar. Y menos aun si eres negro en esa  sociedad  de mediados del siglo XX en Estados Unidos.  Lo único que puedes hacer es aceptar las normas. Trabajas por un salario mísero. Sobrevives con una sonrisa en la boca. Bebes una botella de aguardiente cada viernes por la noche. Cantas un viejo blues sobre un perro bueno y obediente llamado Blue. Encuentras a una mujer que te proporciona un hogar donde descansar. Y luego… Bueno, luego elevas una cerca a lo largo de todo ello, a lo largo de esta pequeña región a la que consideras ‘tu vida’. Crees haber encerrado ahí dentro el amor. Apoyas la mano en los tablones. Compruebas que la verja está bien asentada. Y te reafirmas en tus principios. "Soy el  puto amo", piensas. 

La sociedad no cambia. Sólo la valla te separa del temor. Y has construido esa valla con tablones de respeto. Sólo así resistirá el amor aquí dentro.

Salvo que tú no quieres estar encerrado ahí. No todo el tiempo.

“Algunos construyen cercas para mantener alejada a la gente; otros, para mantener a la gente dentro”, le dice un viejo amigo a Troy.

Troy ha construido un cerca para encerrarse a sí mismo. Todo ha sido en vano. Nada en la vida le ha dado motivos para creer que las cosas puedan cambiar; menos aun las personas. Incluido él. Sin embargo, si no se respeta a sí mismo, qué le queda en la vida.

Este es uno de los dilemas que afronta el personaje central.Todos los personajes aceptan las verjas que encierran sus vidas. La película  es  tranquila, lenta, fluida y extensa,  y nos va hundiendo en sus contradicciones. El drama cae al final por su propio peso, como una enorme aglomeración de nieve acumulada en las ramas de un árbol. De golpe. Casi en silencio entre tanto exceso verbal.

Lo  mejor, sin duda, Viola Davis ,  que hace valer cada uno de los minutos de su actuación con una entereza descorazonadora.

“No sabía cómo mantener su fuerza así que tuve que darle pequeñas partes de mí”, se justifica Rose en relación a su marido, “Fue lo que la vida me ofreció como mujer y lo acepté.”

Quien está delante de ella en esta conversación final es Cory, el joven hijo del matrimonio. Cory será quien salga más malherido del conflicto. La coraza de la madurez todavía no está armada.

Sólo años más tarde entenderá el significado de la cerca levantada por su padre. No le será fácil perdonarle, ver amor donde había sentido tanto temor.

No le será fácil. Nada fácil.

Por eso son tan importantes las palabras de Rose. Cory debe aceptar que su padre ha sido parte de él, que es parte de él, que lo será siempre. Pero él no es Troy. Él representa una sociedad que lo cambiará todo. O, al menos, que lo intentará con todas sus fuerzas.

Lograr aquello que tanto temía su padre tal vez sea la única forma de demostrarle su amor.

La única manera de derribar la cerca que los separa.

Porque hay una línea que separa a padres e hijos. A lo largo de esta línea algunos padres elevan una cerca de respeto.

Troy Maxson era una de esas personas.

Resultat d'imatges de fencES  DENZEL

No hay comentarios:

Publicar un comentario