domingo, 4 de abril de 2021

EL JUEGO DEL PARCHÍS.

 No veo  los telediarios. Y aconsejo hacer  lo mismo. Es una buena terapia.


En el cuerpo  humano es muy difícil que  se den dos enfermedades juntas, pero en los noticieros  las  malas noticias  caen en cascada  sobre  la  sala de estar mientras cenas en pantuflas.

La vida  sin  esas noticias,  pura manipulación , sigue siendo una fiesta y en medio del baile a uno le importa mucho más vivir  sus propias noticias. A  poder  ser todas  buenas. Y  las malas , a bailarlas a   ritmo de  bolero.

Hay  que buscar la forma de tener un diseño  propio  y optimista  de  la vida. Una estética de la belleza, del bien. Y esto , pase  lo  que pase.

Hay  personas  que tienen un  concepto ruinoso  de  la existencia. Lo he visto en la  gente del campo , y en  un tipo de empresario  tipo míster Srooge. Tristes  porcinos.  Algo parecido a  la  opinión que tiene un agricultor   del granizo  o  la sequía. Nunca  están contentos. Siempre profetizando  lo peor.  

La vida, ¡ pura incertidumbre!. De repente  entra un idiota en la  sala  de estar  de  tu  casa , se ha acercado a la partida de  parchís   que estabas jugando a dos tan tranquilamente , ha levantado el tablero para hacer la gracia de ver la oca y  esparce   por el suelo todas las fichas, las azules, rojas, anaranjadas y moradas. ¡Y  a  tomal  pol culo!

Ya  sólo puedes  colocar de  nuevo en las casillas de salida todas  las fichas , pero ya no está tu pareja . Ese cabrón se la ha llevado  para siempre. Ten cuidado  , la rabia que acumulas   te hace agitar  con furia los dados en el cubilete para devorar   todo  lo que se cruce en tu camino. 

No  te  preocupes. Nada de  eso importa. Al final de tus días, sean muchos o pocos, te darás  tu mismo la bendición persignándote  la señal de la cruz , rociarás tu cadáver con tus lágrimas , y sentirás un beso en la frente

Y  sabrás ,sin que nadie  te lo diga,   de quién es ese beso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario