Estoy en la cama durmiendo y estamos ese tiempo que no sabes si tienes que quitarte las mantas - yo duermo con dos mantas portuguesas muy vistosas y amorosas- o llevarlas al altillo del armario. Es una responsabilidad. Porque si las trasladas al altillo hasta finales de octubre ya no hay vuelta atrás.
¿Qué hago?. Pues algo que nunca falla en este entretiempo: saco la pierna por un lateral que abro con los pies porcima de las mantas. No sé qué ley física de la termodinámica rige allí, pero la verdad es que el cuerpo se regula.
¡Cuántas veces en la vida uno saca la patita de su zona de confort para regular ese "demasiado bien" del interior habitual en el que uno se desenvuelve! Dicho de otra forma, la vida es esas mantas , y a veces sacamos la patita para hacer que las cosas sean más agradables.
En el gimnasio al que voy hay mucha gente que parece que va allí a sacar la patita de su edredón particular , o de las mantas. Tíos maduros, abueletes con caras de malotes, vestidos con camisetas de calaveras skulls heavys, cadenas en la chupa, de cuero, botas shúpame la punta, pantalones pitillo estrechos , pelo largo sucio , y que andan raro.
¿Por qué la gente rara anda raro?. Ahí dejo la pregunta.
Muchos hablan como recién despertados.
Después los ves castigándose en las series de las diversas máquinas , resoplando, alguno blasfemando al soltar la pesas al suelo, y acojona mucho.
Esas pintas son como su pequeña huida de su rutina. Porque luego sales y te lo encuentras subiendo a un Dacia.
O la yaya que se rebela tiñéndose el flequillo morado. A esas las veo cuando van a llevar al nieto al colegio . Parece que dicen "yo no soy como todas, tengo el flequillo morado...yo sé de qué va la vida, lo mismo llevo al nieto al colegio, o me pongo a tocar el bombo en una batucada".
A uno también le gusta despistar a su particular Suso y saca la patita y quiere ser otro. Es más, estoy convencido que la mayoría de las tonterías que he hecho han sido por esa razón, las sexuales incluidas. Por idiota.
Somos así. Nos creemos alguien por sacar la patita de nuestra vida ordinaria, pero al final somos Donald Gennaro, el abogado de Jurasik Park que muere cagando.
Ya tenía escrita la entrada ayer cuando escribió Luxindex su comentario. Profundo, como todos los suyos. Y sí, tal vez esa forma que cada cual tiene se sacar la patita de su edredón sea otra manera de fingir.
Si alguien escribe reparando en que sacando una pierna de la ropa de cama en este entretiempo el calor corporal excesivo acumulado se disipa y puedes, así, seguir plácidamente durmiendo… ¿Qué queréis! Yo me fío de todo lo que diga.
ResponderEliminar¡Qué singular detalle tan común como generalmente ignorado! ¿Quién escribe de eso? Pues alguien perspicaz, que es condición previa para ser, de verdad, por derecho, bueno. Alguien como Suso.
Y es que hay buenos y “buenos”.
(Perdona, Suso, por el embarazoso peloteo, pero es lo que ha salido a vuelapluma al leer tu texto).
Luxindex.
¡Qué alegría leerte, Lux!
Eliminar¡Qué alegría!
Me estás poniendo el ego guapo.
ResponderEliminarGracias, hombre.
Gracias siempre a ti, Suso, que tanta compañía nos das con tus escritos tan profundos como variopintos.
ResponderEliminarLuxindex.