miércoles, 7 de octubre de 2015

INOCENTE CUANDO SUEÑAS.

Siempre  duermo  bastante bien . Últimamente por las noches, tengo la sensación de permanecer en un estado que no sé como definir , no es duermevela,  algo  brumoso.

La tercera parte de nuestra vida la pasamos en la cama, por lo que dormir bien debería ser una de las principales prioridades. Doy gracias por no tener problemas  en ese sentido. Una persona que duerme mal no está en condiciones de afrontar los retos de la existencia cotidiana.

Me gusta  dormir. Mucho. Dormir profundamente es lo más parecido a un viaje al más allá.Al despertar, tenemos la sensación de volver a nacer.  Y de la siesta, ni hablemos. No la perdono.

Nunca he dormido como cuando era niño. Compartía cama  con mi hermano - sí, cama, habéis  leído bien. Y en Bielsa, un pueblecito del Pirineo donde veraneábamos ,  por las noches, escuchaba  las campanas del reloj de  la iglesia y me arrebujaba entre las sábanas  y dormía como un bendito.

Al llegar el invierno, recuerdo los dormitorios helados. Mi madre  calentaba todas las noches bolsas de agua que mi hermano   y yo nos poníamos en los pies para soportar  el frío.

También recuerdo  largas excursiones a la montaña, auténticas palizas que te dejaban derrengado  En el Refugio , nos metíamos en las literas  debajo de tres o cuatro mantas.Pronto me quedaba dormido, sumergido bajo el calor acogedor del lecho y aislado del mundo en aquel barracón pirenáico .Parecía que la noche iba a durar una eternidad porque no existía obligación alguna al día siguiente.

Cuando nos levantábamos de la cama, los cristales estaban escarchados y la pradera  recubierta de un manto blanco y todo en un absoluto silencio.

Por la noche, el sueño lo borraba todo. Caía en un trance hipnótico y reparador, que me hacía sentir como un recién nacido. La felicidad consistía en aquella inconsciencia, pero yo no lo sabía. Nada de aquel mundo existe ya fuera del doloroso recuerdo de la ausencia.Acaso la vida no es más que perder aquello que queremos.

Hay una canción de Tom Waits que se titula INOCENT WHEN YOU DREAM. Estremecedota.

A veces pienso , como dice la canción :

 "son recuerdos los que estoy robando 
pero eres inocente cuando sueñas, cuando sueñas".

Y es verdad que dormidos somos inocentes.


3 comentarios:

  1. Estoy de hospitales hasta los mismísimos.
    Citas, reuniones, charlas, consejos.
    Parole, todo paro le.
    ...
    Ayer mismo, en una multitudinaria reunión con padres de pacientes, se me apareció la Virgen.
    Treinta padres y madres abatidos por los mordiscos de la enfermedad de sus hijos, éramos atendidos por una bienintencionada psiquiatra cincuentona.
    El destino nos concedía cinco minutos de conversación a cada uno con la galena.
    ...
    Mi compa de silla de la Seguridad Social era una señora recién parida, con un hermoso bebé de pocos meses, el cual entendió perfectamente que la reunión era muy seria; así que mantuvo un sepulcral silencio, mezcla de respeto y sueño santo.
    Pero cuando le tocó el turno de hablar a mi compi, el bebé decidió que aquello era insoportable y nos mandó a todos al carajal, interpretando a pulmón abierto un sentido y estereofónico llanto sentido.
    Y ahí fue que se me apareció Nuestra Señora y me dijo exactamente cual era mi papel en este perro mundo.
    ...
    Me levanté, le pedí permiso a los padres, agarré a la criatura y nos fuimos al pasillo juntos a buscarnos la vida, colega.
    ...
    Si hay en el mundo un paisaje duro, es un pasillo de un hospital.
    El dolor es tan nítido que de vez en cuando te cruzas con los Cuatro a Jinetes del Apocalipsis tabaleando a toda leche.
    ...
    En aquel inóspito paraje tuve la fortuna de acunar a mi joven acompañante, cantarle una suave canción de cuna, apoyarle en mi pecho y sentir el verdadero sentido de la Creación mientras que el cabroncete se echaba otra siesta de libro.
    ...
    Me dio tanta paz sentir su profundo sueño, que durante un cuarto de hora fui el Rey del Mambo en versión original.
    ...
    Acabó la reunión, los padres recogieron al bebé y yo volví a mi vida de siempre.
    Donde los adultos mienten, la muerte viaja en ambulancia y las flores son de plástico.
    ...
    En realidad soy un tío con suerte, con mucha suerte.
    Me echo unos amigos que son la bomba.
    Los muy zorros, ni mienten, ni se cortan en público.

    Duermen los angelitos, como si quisieran tranquilizarte en medio de la tormenta.
    Como si en cada cabezada, quisieran recordarte que la Redención es posible.

    Solo hay que sentir como ellos.
    Ser profesionales de una profunda Paz.

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  2. Suso, me gustan mucho estas historias de tu infancia.Gracias y Sigue...
    Buen día!

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  3. a mi tambien me ha encantado

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