Estás en el AVE y una azafata gentil y de carnes prietas sobre un uniforme gris marengo de verte te ofrece los auriculares para ver de cerca.
La ves "de venir" . Es una fermosa pastora que estudió bachillerato agrícola en la EFA "Pedro Almodovar Torres Solanot de Aznar y Errejón de las Altas Torres ".
- ¿Auriculares?-
- Ha elegido usted Diesel E- Sus- le contesto.
Entonces le haces la zancadilla y la bella mozuela cae de sopetón y bruces , previo casque mofletudo por el brazo de la butaca , de punta cabeza , al duro suelo.
Una vez allí , despatarrada y carmesí, te agachas con sumo cuidado sacerdotal de que no se te rasgue el pantalón por la entrepierna , y le preguntas:
- Do you know lastimado Port Aventura ?
Ella, para que no me escape de su radio de acción, me coge el pie, con el zapato puesto, y se lo coloca en el cuello, para asirme cabe sí.
Y al ver que estoy interesado por ella y su estado de mala esperanza , dice:
-¡Oh, Sus, me tienes asida a ti como la hiedra!...¡quiero casarme contigo por la Inglesia !
Y la incorporo cogiéndola de la mano , la abrazo con fuerza estentórea , la aprieto a mi coxis , y la digo con loco ardor apasionado:
- ¡¡¡Te amo, Clarita Poyales Arantzazu , te amoooo!!!
- Tengo pérdidas de orina- contesta con sinceridad salvaje y sencilla.
- Lo huelo- contesto más enamorado que nunca antes estuve.
Y cuando estás en ello, se resbala Clarita de tus brazos, como una trucha furtiva, y resulta que te ha birlado el ejemplar del Catecismo de san Pío X , y el Rolex que heredaste de tus primeros padres.
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