miércoles, 4 de agosto de 2021

LA GANZÚA DEL DESEO.

La vanidad tiene más grados que la absenta. 


Tuve un conocido que durante un tiempo estuvo enganchado a una página de relaciones. Él lo que quería, así me lo dijo, era "follar". Para eso en su currículum puso unas sarta de mentiras sobre él: posición económica, foto del perfil, gustos, titulaciones...una especie de Pedro Sánchez  de medio pelo.


Poco después conocí un experto en redes sociales y me explicó como funcionaba aquello.


"Esas  páginas son ciegas. Funcionan por algoritmos.  De cada cien personas que la usan, 70 son hombres. Prácticamente todos quieren follar. Pero a la empresa le interesa , sobre todo, cuidar las mujeres, porque son pocas. Eso es un valor. ¿Cómo las protegen? . Pues haciendo prácticamente inalcanzables a las muy guapas. Dicho de otro modo, las que están muy buenas...


¿Y cómo sabe la máquina quiénes son las que hasta los perros y los gatos se dan la vuelta para verlas?. Por la cantidad de " likes" que tienen de ellos.


Entonces lo que hacen es derivar a los hombres a una segunda división de mujeres que en el ranking de la página están en la zona media. Esas , en muy poco tiempo, se dan de baja. Son folladas y tiradas como colillas. Y eso produce mucha frustración.


Si vieras las mentiras que esos hombres  sueltan para quedar  con ellas. Es como  la ganzúa del ladrón que abre la puerta  del deseo...".


Esa ganzúa abre la vanidad de ellas. 





2 comentarios:

  1. Imagino que hablas de aplicaciones tipo TINDER.

    No obstante, a mi me habían contado que existen otras aplicaciones o redes sociales para cristianos que quieren encontrar una pareja, en plan serio. De hecho conozco algún matrimonio, no es coña, que ha surgido así.

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  2. Yo también, pero son muy raros... no porque sean pocos, sino porque los encuentro de otro mundo

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