CRETINEZ SIN FRONTERAS.

Mi padre era un tío muy suyo. Un hombre libre, que no tragaba con lo políticamente correcto. No he conocido persona más delicada con su mujer, mi madre, ni caballero de ideales familiares  más altos, pero en cuanto olía negoci, el Corte Inglés, o  un rollo de publicidad de cadena hotelera,  o la televisión con americanadas sobre el amor, las celebraciones y mandangas del día del padre, de la madre, o de mis cojones treinta y tres, no tragaba.

Y no se creía nada. Veía al vecino del sexto con  " la chata"  , su mujer,  del brazo  - que es que había que verlo- y  , literalmente, se partía la caja. Pero en familia, era hombre muy de allá cada quién con sus cosas.

Mi padre pensaba que esos matrimonios que pasean abrazados por la calle eran unos estafadores. 

- Ese  en su casa, se planta delante de su mujer  apretando la tripa  en gayumbos y le dice "  mamá, estoy gordo" ( porque esos tíos son de los que llaman "mamá" a su mujer).

Y , divertido , añadía:

- Y ella , para consolarle, le responde " qué va gordo no estás. Sólo tienes un poco de tripilla. Pero le miraba como si cantara " y ballenas desapareciendo por falta de escrúpulos comerciales". 

Después, comentaba mi padre:

- Otro día va ella y le dice " estoy gorda". Y ese señor que ves tan abrazadico a su mujer  le contesta,  " como siempre, no te preocupes".  

Mi padre era un tío con mucha guasa.

"La gente es tonta. Todo son inventos para sacar dinero. Parece que hay que celebrar cualquier chorrada  y  tener una excusa para gastar como loca. " ¡Ay, como es el día de los enamorados  nos vamos de viaje, o te regalo un brillante!, ¡ paparruchas! Esos son inventos de los vendedores de motos pintadas de verde".

Era muy divertido verle imitar al marido que se hacía el enamorado agarrando el talle  de su señora por la calle para después dejarla sola en casa mañana, tarde y noche. 

Y a mi me  parecía una exageración. Y ahora veo que tenía toda la razón. Toda esa mierda de anuncios de Viajes, de Cruceros, de Fragancias, de  Securitas Direct , de su puta madre,  de  creadores de felicidad sin escrúpulos - ya no  hablemos de esos hijos de la gran puta de Cofidis.  Cretinez sin fronteras.

¿ Es posible que haya tanto encefalograma plano en este país?

Si hasta la política se ha convertido en una bola planetaria sobre cosas como la " FELICIDAD", el " BIENESTAR"... el colmo, escuchar a Sánchez  hablar de  "  lo hago por el bien de España".

Anda ya.