CREER Y SENTIR COSAS RARAS.

En Bellaterra me crucé con una señora , mujer de un antiguo alumno, y muy partidaria de las apariciones de la Virgen en Medjugorje. Le dije que no pensaba ir a un lugar donde andaban endemoniados y poseídos, y mucho menos llevar a niños allí.

- Pero, supongo, creerás en el diablo.

- Mi fe va por lugares de luz y de alegría. Y si intuyo que está el demonio , salgo de allí pitando. Es un asunto que no me importa.

El tema es que hay mucha peña que se dice católica, ortodoxa, tradicionalista  que chapotea en mundos donde "tocan", "ven", " huelen", " oyen" lo divino y sus fronteras. Todo con  un disfraz  de supuesto fervor, devoción y lealtad a la doctrina recta. Es un “afán por lo extraordinario”: un afán que nubla el corazón y eclipsa todo crecimiento interior. 

No sólo son las apariciones marianas.

Eso mismo sucede con esos grupos que se chutan canciones emocionalmente estupefacientes , y cervezas, junto a adoraciones eucarísticas casi lisérgicas. Todo es como la pócima de Panoramix  que da fuerza sobrehumana. Me refiero a Hakuna.

También están  los llamados retiros de “sanación”. He asistido a uno  de ellos con un grupo que se llama Emaús. Allí  se cree en carismas extraordinarios por medio de los cuales se obran milagros de curación de enfermedades físicas o incluso morales. 

Dos días antes de irse al cielo de punta cabeza Joaquín Romero - ¡y de qué manera!-  se acercaron a su habitación dos seres humanos, padre e  hija. La niña tendría 19 años. Venía con guitarra, lo que prometía  una velada de yupiyaya, porque esta gente no tiene complejo alguno, ni sentido del ridículo.

La chica explicó que acababa de terminar un retiro  con los de Emaús. Y propuso cantar alguna canción. Joaquín , que era un santo, asintió ( no podía hablar). Y se cascó dos temas - una tortura que, imagino, era el empujoncillo que necesitaba  Joaquín para saltarse el  Purgatorio. Una vez terminado el suplicio, propuso realizar una oración de sanación:

- Es una oración invocando al Espíritu Santo pidiendo la curación de una persona. Muchas veces es sanadora.

Y rezamos. Yo creo que Joaquín pidió que no se cumpliera. Ese hombre estaba deseando ir con su Amor.

Todo esos mundos son muy peculiares. Por decirlo finamente.

Y no hablemos de cuando esos retiros, esos grupos, esas bandas de pijos embobados,  sirven también para que algunos sacerdotes chupen fama de santidad , de líderes guays. No daremos nombres.  Creo que alguno me lee.

También se da mucho el rollo de de cursos, conferencias, debates, youtubers…etc  donde se ofrecen temas de carácter apocalíptico . El fin del mundo  y toda ese mundo que roza lo grotesco por parte de peña que se permite  hacer esas “profecías” desde supuestas revelaciones. Allí se nos “descubre” cuando llega el fin de los tiempos, las olas oceánicas que invadirán los continentes, las alianzas de potencias militares que implantarán el reino de satán en el mundo…con aportaciones de fechas que, en futuros retiros, serán obviamente cambiadas…y, como no, el Papa como la personificación del Anticristo.

¿ Este Papa el Anticristo? De verdad. Satán no puede ser tan gilipollas.

También se están dando encuentros dentro de templos donde de repente el “espíritu” se suelta y  aquello acaba siendo la Casa de Tócame Roque.

En fin, que cada un haga y crea lo que le pete. Uno cree en Misterios. Y de allí no me salgo. La Eucaristía es un Misterio. La Virgen , otro. La Fe.