Quiero agradecer a tod@s los que , de un modo u otro, me escribisteis dando ánimos. También a los que prometen oraciones. Y, por supuesto, a los que no creéis que valga la pena rezar porque no hay más que lo que hay.
También a los que aprovecharon para insultar y alegrarse. Que te lea un odiador da mucho "charme ".
Pero hoy voy a subir un comentario que no publiqué, llegó por watsap.
Sin anestesia. Tal y como lo recibí. Me parece un ejemplo de fe. Añadir que esta mujer no es de la opus. Ni ganas.
" Buenos días Suso.
En primer lugar que tienes garantizadas nuestras oraciones encomendándote a ti. Tenemos una lista de gente que llevamos rezando cada día por ellos. Y vas a estar tú también en esa lista. X ( su marido) reza mucho más que yo. Yo no soy tan tan , ya me entiendes, ¿no? Entonces , yo tengo mi fe, y tengo aquí la reliquia de san Juan Pablo II, y rezaré la oración por ti cada día, igual que he hecho por otros.
Y luego decirte que los médicos no siempre aciertan. Conmigo no acertaron, porque después de perder cuatro críos, que me dijeron que no podría tener más hijos...pues nació X . Y, encima, chico. Que me habían dicho que yo chicos no podía tener por todos los problemas que teníamos con la sangre, etcétera.
Luego tuve una preeclampsia. Estuvimos X y yo ingresados, bueno, X en mi tripa, claro. Y no nos fuimos porque Dios no quiso.
En segundo lugar , también te digo que a mi me operaron un cáncer de colon antes que naciera X, el año antes. Y aquí estoy. Me quitaron el tumor, llevo diecinueve colonoscopias, y ni me tuvieron que poner bolsas y, gracias a Dios , todo fue bien.
Y la mayor tiene cáncer de ovarios. Lo tuvo con 22, y ahora cumple treinta. Y la pequeña tiene un síndrome de Pendred .Y, aparte de lo enferma que estuvo al nacer que me pasé cinco años en el hospital con ella , porque nació sin un trozo del intestino grueso , con una atonía muscular y un montón de cosas que tenía la pobre...que me había corrido todos los hospitales de Zaragoza con mi suegro, y Pamplona , y gracias a los amigos médicos de mi padre - jefe de servicio en el hospital de Barcelona- entramos en san Joan de Deu. Nos fuimos a vivir a Lérida nueve años, y allí la sacaron a flote.
El síndrome de Prended es una enfermedad neurodegenerativa muscular, hay poquísimos casos en España. Nos dijeron que sobre los veinte años podía acabar en silla de ruedas. Tiene 28 y está danzando como una loca , trabaja en una residencia de enfermera.
¿ Me comprendes? Es para animarte todo. Que todo es cuando Dios querrá. Intenta no somatizarlo y disfruta de la vida , y disfruta de la naturaleza. Es donde yo estoy mejor también. Ánimo, y un besico muy fuerte".
¿ Miedo? Después de leer esto , ¿ quién dijo miedo?
En la Historia se han dado batallas famosas que, pese a haber sucedido hace miles de años, somos lo que somos todavía gracias a su victoria. Muchas de ellas fueron hechos que nadie duda en llamar milagrosos.
Sin triunfo de los griegos contra los persas en el Paso de las Termópilas y en Salamina no hubiera existido la filosofía de Platón, ni el derecho romano ni el cristianismo, ni la Divina Comedia, ni Leonardo da Vinci, ni la duda metódica de Descartes, ni Juan Sebastián Bach.
En el fondo toda nuestra cultura se la debemos al general Temístocles, que derrotó a la escuadra naval del rey Jerjes I en la isla de Salamina, y al general Alcibíades, que acabó con las esperanzas de Darío I en el mar y la campa de Maratón.
También sucede en cada historia personal. ¿Quién no lleva dentro un Paso de las Termópilas personal que ha alterado el curso de su vida?
Cuando esta mujer y su marido luchaban contra profecías de médicos con gafas y muchos bolígrafos en su bata . Mientras los pájaros cantaban los dos rezaban y esperaban . Y, como ellos, todas esas otras batallas de otras historias que se realizaron en noches de lágrimas y oración que hoy están llenas de alegrías ondulantes donde el trigal se mece con la brisa de primavera.
Y en todas esas maravillosas historias de milagros , siempre, la fe y la esperanza, el que " se cumpla lo que Tú quieras". Tantas biografías dependen de esas batallas, que siempre se dan con buen humor, alegría, esperanza, y optimismo.
Suso, dos cosas: 1) Qué suerte tienes de conocer a esta mujer y su familia, de tenerlos a tu lado (gente luminosa en grado sumo. El Arrebato tiene una canción dedicada a la gente luminosa... su letra les hace justicia); 2) La imagen que acompaña la entrada es muy gráfica: la mujer que quería tocar el borde del manto de Jesús. Esta historia del Evangelio siempre la asocio contigo, es inevitable (lo quiera o no 😃). Me explico: hace 4 décadas aprox, eras mi profe de Reli (cuarto o quinto de EGB) y nos explicaste este episodio de tal manera (con tanta pasión, con tanta energía, no sabría decirte...) que se me quedó grabada en la mente de forma indeleble. Abrazo y gracias!
ResponderEliminarEn la infancia se abren muchas puertas que enseñan el futuro.
EliminarSí, tengo mucha suerte 🍀
Ayer no escribí pues no sabia que decir, hoy al leer lo que te han escrito,... pues eso mismo.
ResponderEliminarPues muy agradecido!!!!
EliminarY mientras, nuestros diputados, demasiado liados como para reunirse ayer con enfermos de ELA. Sinvergüenzas.
ResponderEliminarYo admiro mucho la solidez de estos matrimonios, capaces de descubrir la providencia, la bondad de Dios y permanecer unidos.
ResponderEliminarLo he experimentado de primera mano.
Pasaré por tus dominios en Semana Santa haciendo el camino portugués. Si un peregrino te da un abrazo y te invita a un café acéptaselo!😊
ResponderEliminarPor supuesto. Escríbame a susomendi@gmail.com
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