Es cuando llega la prueba - enfermedad, un batacazo económico, divergencias de carácter,de intereses, de pasiones- cuando las complicidades egoístas de la pareja se desatan , se derrumban, y se revela la verdadera naturaleza del amor.
Nada era lo que parecía. O sí
La impureza del amor se mide por el número de aliados espurios que necesita para subsistir, y su pureza por el número de enemigos que es capaz de afrontar sin morir.
Seamos justos: no puede darse un amor autónomo: nuestro amor necesita de alianzas, pero no a cualquier precio.
Todos conocemos uniones impuras y débiles que se sostienen sobre factores extraños: el sexo, la pena, cumplir por presiones legales o sociales, la seguridad que aporta el bienestar de la pareja, la sumisión a idénticos conformismos vacíos.
Hay que esperar a la prueba, que llega siempre, para testar la pureza de nuestros amores.
Observo una pareja joven en una cafetería, y advierto que nadie sonríe durante horas, cada uno está a su bola, una escuchando por unos pinganillos, él hablando por teléfono, y tengo la impresión que aún no he llegado la prueba. Tal vez les ronda.
Nada era lo que parecía. O sí
La impureza del amor se mide por el número de aliados espurios que necesita para subsistir, y su pureza por el número de enemigos que es capaz de afrontar sin morir.
Seamos justos: no puede darse un amor autónomo: nuestro amor necesita de alianzas, pero no a cualquier precio.
Todos conocemos uniones impuras y débiles que se sostienen sobre factores extraños: el sexo, la pena, cumplir por presiones legales o sociales, la seguridad que aporta el bienestar de la pareja, la sumisión a idénticos conformismos vacíos.
Hay que esperar a la prueba, que llega siempre, para testar la pureza de nuestros amores.
Observo una pareja joven en una cafetería, y advierto que nadie sonríe durante horas, cada uno está a su bola, una escuchando por unos pinganillos, él hablando por teléfono, y tengo la impresión que aún no he llegado la prueba. Tal vez les ronda.
Muy intersantes las últimas entradas.
ResponderEliminarAyer hablaba con mi costilla de este tema , sobre una extraña separación que nos ha dejado perplejos y dolidos. Y lo que cuentas lo explica muy bien: llegó la prueba.
Es que en lo de en lo bueno y en lo malo, ya no cree casi nadie. Y además lo dicen.
ResponderEliminar"Si a mi me pasa esto, me separo y punto". En todo caso, es bueno saberlo...