SIN COBERTURA

He   conocido un tío  que  va sin cobertura             esté donde esté,

No tiene teléfono. Está  incontaminado. Tampoco ve la televisión. Está fuera de la basura mediática. Se niega  a  ser un insecto más en la telaraña  de esta sociedad  donde  nos parecemos todos tanto.

 Es un privilegiado, pues sin  moverse de casa  pasea  descalzo por playas  de arena  limpia  y  parajes reservados.

Voy a  vivir la semana  que viene a Sant Cugat . Buscaré   un lugar inaccesible donde refugiarme. Estaré en una zona peatonal, con una plaza  de acuarela , muy cerca del monasterio , y   lejos de la jodida telaraña que  lo envuelve todo.

Nada de radio y televisión. Muchas  novelas. Intentar ser  un  individuo sin cobertura ,  que  no tiene necesidad de huir, puesto que él es su propio refugio. 

Quisiera ser invisible. Pobre. Desprendido de todo. Ojalá  se acerque  el día en que  digan de mi, y de ti : no ha llegado todavía, ya se ha marchado, no se le espera, no lo llames, nunca contesta, está y no está, no existe, a mandado a tomal pol saco todo.

 ¿Qué ha sucedido   para  que este hombre  reaccionara así?. Su móvil vibraba cada minuto reclamando más papilla. No paraba el hombre de mirar , angustiado y febril, el aparato  , por si acaso... Ese aparato se había convertido en un testigo de sus miedos, de sus  egoísmos, de sus ataduras, de  sus miedos . Era un  comisario político de sus  delaciones, de  su  doble vida al servicio de sus enemigos. 

Derepenete, depronoto , un día se sintió perseguido y acorralado en la red por una multitud de clientes, jefes,  de  señores feudales , de princesas y brujas,  y amigos que trataban de devorarlo. 

¡A  la  mierda! , arrojó el móvil al  río ,  y comenzó a vivir por dentro como un hombre nuevo,lejos de la tela de araña.

Y echó a andar  por la Collserola.