A veces sueño despierto con asistir al fin del mundo. Es algo que ocurrirá con seguridad dentro de millones de años, cuando el sol se apague. Pero puede que algún zumbado adelante la fiesta y presenciemos el definitivo fundido a negro.
En el fondo del cerebro humano existe una esperanza apocalíptica A mí también me gustaría ver el fin del mundo, si va a ser tan espectacular como dicen.
Subiría al Tibidabo , pediría un Jack Daniel , me asomaría ora a la falda de Barcelona, ora a la del Vallés, y presenciaría en primera fila una apoteosis escénica de fuego, una cascada de misiles , o una niebla espesa de gases letales de color azul que bajarían a la ciudad Condal formando un mar de brumas densas con islas como la Sagrada Familia, la Catedral , en el Barrio Gótico , o se derramaría como un lago entre Sabadell y Tarrasa.
Por primera vez en nuestra Historia nos sentimos capaces de destruir la tierra, y en ese sentido hemos llegado a la cima en nuestro papel de reyes de la creación. Es el final de la película "¿Teléfono rojo?, volamos hacia Moscú". , donde el piloto desquiciado debe soltar manualmente una de las bombas, cayendo con ella mientras simula estar a lomos de un caballo salvaje.
Por primera vez en nuestra Historia nos sentimos capaces de destruir la tierra, y en ese sentido hemos llegado a la cima en nuestro papel de reyes de la creación. Es el final de la película "¿Teléfono rojo?, volamos hacia Moscú". , donde el piloto desquiciado debe soltar manualmente una de las bombas, cayendo con ella mientras simula estar a lomos de un caballo salvaje.
Ya lo hemos intentado una vez, pero no terminó de salir bien. Y es que no debe de ser fácil. Tal vez los islamistas radicales lo consigan, o el norcoreano gordito que querrá pasar a la Historia....pero, ¿qué Historia, si después no queda nada?.
Después de la bomba de hidrógeno siempre quedará a salvo un chimpancé medio gilipollas que se pondrá a pintar en una cueva y, hala, a volver a empezar.
Nuestra existencia seguirá siendo un conjunto de pequeñas historias : una mala enfermedad diagnosticada, maravillosas erecciones, repetir curso , el suicidio del padre de aquel amigo, una inspección de hacienda, premios del cupón de los ciegos, rebajas en grandes almacenes, la novia que regresa a tu vida, un divorcio que no esperabas , amores adolescentes, tu padre que no termina de soltar la pasta.
Y esa Manuela, o Matilde, o Ana, o María José, o Carlota, que están tatuadas y herradas en el costillar sentimental de tu vida.
Y esa Manuela, o Matilde, o Ana, o María José, o Carlota, que están tatuadas y herradas en el costillar sentimental de tu vida.
Pero el gran fin de fiesta no llegará hoy. Una pena.
Los recuerdos.... recuerdos son....
ResponderEliminarEl presente es mas real, comparte la felicidad con el que tienes a tu lado y olvida el pasado... no sirve para nada .... si valoras a la pesona que esta contigo...
La que se fue.... puede que se haya dejado seducir por ese amorio del pasado que le nublo la vista y no le dejo ver la maravilla del presente...
si no se nos nublara la vista y la mente.... que felices seríamos....
¡Cierto!
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ResponderEliminar¡Cuánto tiempo ,m Luxinndex!
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