Sufrimos porque las cosas sean distintas a como realmente son.
Lo mismo sucede en nuestra vida . Quien tiene por pareja a alguien mustio desearía la compañía de una persona con carácter alegre y desenfadado . Y, con toda seguridad, este último tendrá harto a quien convive con él un día tras otro.. Siempre las mismas gracias, los mismos chistes, las mismas costumbres. ¿Por qué anhelamos siempre lo que no tenemos?
Si lo consideramos, nuestro mayor tesoro es lo que ya poseemos. Y bastaría perderlo para darnos cuenta de su valor. Eso sucede con personas, animales, cosas.
Vivimos en el cambio. La moda es progreso. La sociedad del bienestar es cambiante. Eso hace que pensemos que la estabilidad es algo malo. La insatisfacción es lo que permite el progreso de la ciencia, las artes y todo lo que tiene que ver con la sociedad de consumo.
Cuando la vida es monótona la gente tiende a instalarse en la queja y la amargura. Bastantes molestan a los demás –y a sí mismos– de forma totalmente estéril porque de nada sirve señalar lo que no funciona sin ofrecer soluciones. En muchas empresas el cáncer son esas personas. Y si es una pareja, o un matrimonio, también.
Madame Bovary es una señora aburrida , instalada en un estado de insatisfacción permanente a causa del desnivel entre sus propias ilusiones y la realidad. El síndrome Bovary es el de esta gente.
Muchas personas se dicen " si las cosas cambiasen", " si tuviese este otro trabajo", " si ganase más dinero", "si hubiese tomado tal camino profesional..." Se convencen de que cuando encuentren algo mejor, o la pareja ideal, o les caiga la lotería se darán permiso para disfrutar de la vida.
La verdad es que nada resulta como esperábamos una vez que lo conseguimos
Lo que ocurre es que muchas personas cuando llega el momento tan largamente deseado se dicen "¡coño, no era esto!". Ojo, pestaña, que la vista engaña: más que insatisfacciones existen las personas insatisfechas. Por ejemplo, conozco alguno que por nada del mundo vivirían en la casa que vivo hoy. Pero no es la casa, es la persona.
Lo que ocurre es que muchas personas cuando llega el momento tan largamente deseado se dicen "¡coño, no era esto!". Ojo, pestaña, que la vista engaña: más que insatisfacciones existen las personas insatisfechas. Por ejemplo, conozco alguno que por nada del mundo vivirían en la casa que vivo hoy. Pero no es la casa, es la persona.
Y esa gente que les cuesta aceptar las cosas como son, también les cuesta aceptar a los demás.
El típico, o la típica, que hace un un favor a un vecino, y le duele si no obtiene el mismo trato por su parte cuando lo necesita. El quejica que pone a caldo a sus compañeros que no cumplen con sus tareas, que en su presunción piensa que el jefe o la jefa es un ser inútil que está cargándose la empresa.
Al esperar que los demás se comporten de determinada forma les estamos negando el derecho a su manera de pensar, de ser : ser o actuar de modo distinto a nosotros no tiene por qué ser negativo. Cada persona tiene una combinación única de defectos y virtudes. Pero tendemos a enrocarnos y señalar al otro como enemigo.
Conocí un chaval que sorprendimos con una agenda donde escribía y dividía los seres humanos según la blandura o dureza de sus carrillos , galtas, o mofletes. Unos eran "piedra", y otros "globos". El crío se había pasado meses y meses probando mollares, desde profesores a alumnos, y algún sacerdote. Lo inquietante de esta criatura era que despreciaba totalmente el género "piedra".
Así son algunos: sólo "globos", por favor.
La realidad es siempre más amable que las historias que contamos sobre ella . Y los enfados que tenemos con los demás son , en el fondo, algo de nosotros mismos que nos molesta. Por eso mismo queremos cambiarlos, porque es más fácil exigir del otro que transforme su vida que la de uno mismo.
ESPACIO RADICAL: A ESTA LA HE QUERIDO YO MUCHO.
Sí señor! A ser feliz con lo que se tiene. Dejar de perder el tiempo, dar el prmer paso. Disfrutar !
ResponderEliminarmuy buena entrada la de hoy... y creo que es parte del motivo por el que los matrimonios actuales duran poco...
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