sábado, 7 de marzo de 2015

REMBRANDT : LA LÚCIDA MISERIA.

Un pintor vive de retratar a otros, fundamentalmente. Si se prefiere, de pintar "lo otro".

Pero algunos, tarde o temprano,  sienten la  necesidad de autoretratarse.

Y entre todos ellos, ¡y son cientos !, quizás Rembrandt es el más sincero.









Este hombre envejece mal, después de haberlo tenido todo , cuando pierde a su mujer, pierde  a sus hijos, se arruina. Y le importa nada descubrirnos quien es de una manera sobrecogedora.

Es en esos años finales cuando su desnudez le hace  libre y pinta sin restricciones: dibuja , con una ternura maravillosa, su miseria.

 Desde el principio se sintió poderosamente atraído por la ruina, por la poética de la imperfección. Disfrutaba trazando las señales que dejaban las dentelladas de la experiencia mundana: los hoyuelos, las picaduras, los ojos enrojecidos o las arrugas en la piel que daban al rostro humano una riqueza que nos hace entender por qué el rostro es el mejor paisaje que existe.

Rembrandt nos mira y parece decirnos "aprende, amigo: esta mierda también eres tú".


Al final de sus días  está mucho más interesado en figuras que viven y sienten, que se quejan, sufren. Que tienen conflictos internos. No son rostros fríos, sino que podemos ver qué hay en ellos, qué esconden y, sobre todo , en el suyo.

En la Mujer anciana leyendo sentimos lo que este hombre quiere transmitir : La luz brilla desde el corazón del libro y se refleja en el  rostro de esa mujer. Es una luz que retrata la  intimidad de ese libro, con esa mujer. Mirad sus manos. Estamos muy cerca, en la sala leyendo la Biblia con ella. Imposible expresar mejor el acto de leer cuando es meditación.


Y a uno le encantaría estar allí, en silencio, acompañando a esa anciana.

Para mi lo mejor de Rembrandt es que pintó la ternura a través del paso del tiempo, porque sólo el tiempo esculpe en los rostros la ternura. Y lo hizo porque fracasó, después de tenerlo todo. Y la mayor prueba de ello está en sus  autoretratos. Nos mira y dice : " así soy, no como me gustaría ser, como soy".

Y , sin duda, el mas conmovedor, para mi, este anciano Simeón al final de sus días.


Simeón y el niño Jesús son apenas unas figuras oscurecidas, esbozadas. Unas pinceladas bastan. Y tan bien hecho, que permiten no sólo ver, sino sentir, oler y casi tocar.

No es Simeón, es Rembrandt, viejo, que lo ha tenido todo, que ha sido todo, y que , por fin , de vuelta de tanta vanidad, entiende el "nunc dimittis"  mejor que nadie.:  

Ahora, Señor, tu promesa está cumplida:
ya puedes dejar que tu siervo muera en paz.
Porque he visto la salvación
que has comenzado a realizar
ante los ojos de todas las naciones,
la luz que alumbrará a los paganos

y que será la honra de tu pueblo Israel.

Rembrandt sabe que todo es mentira, y tiene en sus brazos la luz que siempre trató de pintar, y que ahora le alumbra, por fin.


12 comentarios:

  1. Muchas gracias por la entrada de hoy.

    Por mi parte, os dejo dos cuadros de Rembrandt sobre la resurreción: „La resurrección de Lázaro“ y „Cristo resucitado“. La diferencia entre los dos resucitados es clara: Lázaro es resucitado, en pasiva, mientras que Cristo ha resucitado por sí mismo. Lázaro es un cadáver revivido que por sí mismo no se sostiene sino que es erguido por la fuerza del brazo de Jesús. Cristo no es un cadáver revivido: es un hombre que ha vuelto a la vida. No lo vemos triunfante, como en tantísimas representaciones de la resurrección. Lo vemos convaleciente, como quien acaba de salir de una operación o de una gravísima enfermedad, pero desde esa convalecencia nos lanza a nosotros, contempladores del cuadro, una mirada luminosa que nos envuelve. Este Cristo resucitado no ha triunfado sobre la muerte aniquilándola y dejándola atrás, sino que la asumido en sí mismo, junto con todo lo que ella significa, transfigurándola en cariño. Lo más grande de su rostro son los ojos, cansados pero llenos de ternura, y su boca exhausta pero cuyos labios esbozan una sonrisa.

    http://drainmag.com/site/wp-content/uploads/2012/03/Rembrandt_-_The_Raising_of_Lazarus_-_WGA19118.jpg

    http://rembrandt.louvre.fr/_commun/rembrandt/zoom_jpg/r23.jpg

    ResponderEliminar
  2. Donde has visto más sonrisas y sonreír mas? En Tamahu o en España?

    ResponderEliminar
  3. Aquí me llama la atención las miradas de los niños, son muy alegres y expresivas.

    Y que por nada se ríen.

    Desde luego , más que en España.

    ResponderEliminar
  4. Perdona Suso, pero leyendote me dió la sensación que, más que de Rembrandt, estás hablando de ti mismo...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Suso siempre habla de si mismo... es un autoretrato continuo.... eso es el barullo... Ese es el Suso de Zaragoza, de Barcelona, de Tarragona, de Lleida y de Valladolid... y probablemente tambien el Suso de Tamahu. Es el Suso poeta, historiador, payaso, traumaturgo, el que exagera las aneldotas, el Suso de pronoto, el Suso mordaz, el Suso amargado, el Suso que hace reir hasta las lagrimas, el Suso patetico, el Suso irascible, el Suso espiritual, el Suso antibetico pero que sigue hablando del betis, el Suso de Manuela,,, siempre Suso. Me atrevo a decir que todo lo que escribe es siempre su autobiografia. Es ahora el Suso del Rembrandt de la última época, pero tambien ha sido el Suso del Rembrandt de la primera época: el arrogante, el seguro de si (mira el cuadro de su autorretrato de la abadía de Buckland). Así es/fue/será Suso... no puede pasar desapercibido

      Eliminar
  5. Buenas noches,
    Junto a los cuadros que mencionas y los dos que menciona el Teniente Quilombo, Rembrandt Harmenszoon van Rijn pintó otras obras, entre las que se pueden resaltar, por su maestría y significado "La tormenta en el mar de Galilea", "El rapto de Europa", "La lección de anatomía del doctor Tulp", "Los síndicos del gremio de pañeros" y, en mi opinión, la mejor de todas "La compañía militar del capitán Frans Banninck Cocq y el teniente Willem van Ruytenburgh", más conocida como "La ronda de noche", que es justo lo que voy a hacer ahora, aprovechando que es sábado y es de noche en España.....me voy de ronda, y lo que te rondaré morena.

    ResponderEliminar
  6. Te la paso...pero rozando el larguero.

    ResponderEliminar
  7. La tormenta en el Mar de Galilea.
    Unica marina pintada por el holandés de la luz.
    Catorce personajes se debaten frente a un destino más que incierto, minutos antes que Jesús efectuara su primer gran truco.
    Las miradas de acojone, la mar brava, los mástiles tensados hasta la extenuación y las velas rasgadas por la fuerza de un viento atroz.
    ¿ quien puede ayudar a estas criaturas ?
    ...
    En 1990 unos chorizos disfrazados de policías lo cambiaron de sitio.
    Cinco millones de dólares ofrece el museo americano por una simple pista fidedigna que sirva para recuperar el lienzo.
    ...
    Hay un tipo, en algún lugar, que disfruta del cuadro para él solo.
    El muy cabroncete organizó el mayor robo del siglo pasado para su personal solaz y esparcimiento.
    ...
    No lo piensa devolver, supongo que hasta que palme.
    Entonces, una policía holandesa de pelliroja caballera y cuerpo de ola, lo recuperará para la Humanidad.
    Y alguien le dará cinco millones de besos en los labios.

    ResponderEliminar
  8. Por lo visto Rembrandt tenía rosácea, una afección de la piel también conocida como "el mal de los celtas", que enrojece la piel y, sin un cuidado adecuado, desfigura la cara. Efectivamente algo de eso hay en su obra... Un beso! Emma Morley

    ResponderEliminar
  9. Buenas noches suso.
    quien no retrata a quien en esta vida.?
    Se juzga muy rápido y se perdona muy poComo.
    Mi teléfono no Va bien, no se como voy a hacer xo ya me comunicaré.
    Un abrazo y suerte amigo.

    ResponderEliminar
  10. Bach escribió un Coral maravilloso sobre el Cántico de Simeón: Nunc dimittis... ya estoy preparado... ahora puedes dejar ir a tu siervo en paz.
    Y aquí , otro pequeño-gran regalo de mi admirado Arvo Pärt :
    https://www.youtube.com/watch?v=Pazzm_f8rJ8
    Gracias por tu escrito de hoy. Un beso

    ResponderEliminar
  11. Prefiero a Dalí véase : "joven virgen autosodomizada por los cuernos de su propia castidad"

    ResponderEliminar