domingo, 27 de noviembre de 2022

PODEROSO CABALLERO...

Hay un asunto que me  apasiona ver: esa gente que no se atreve  a dar el paso en su vida , una decisión vocacional, y  que necesita que le den un empujoncito para  tener  la excusa  y  el argumento de " me dijeron que no era lo mío". No tomar la última decisión.


Conocí uno, el ejemplo puede ser un arquetipo de muchos, que inició una crisis vocacional con un asunto muy común: " tengo depresión, no sé qué me sucede, no consigo levantarme por la mañana porque todo lo veo muy cuesta arriba. Lloro a todas horas". Era cuento. Y, además, el tío era un artista. Pero , claro, ¿ cómo justificar después de dos decenas de años de entrega que aquello no era lo suyo?  Sabía muy bien que sólo una depresión le justificaría.


Saltaron todas las alarmas. Este hombre no podía dejar la institución. Y se volcaron con él, atendiéndole, tratando por todos los medios de encauzar su  crisis.  Él se dejaba hacer. Lo importante era que no fuera decisión suya. Acudía al psiquiatra que le aconsejaron, charlaba con gente muy principal...



- Una vez.- me contaba- estaba jugando a tenis con don X - persona muy principal-  y a mitad de partido rompí  al llorar..."¡no puedo más, no puedo más!".


Al final , estando un día conduciendo  en medio de la Diagonal de Barcelona, sintió que se moría. Era un ataque de pánico. Estacionó en la acera .  Llamó a su madre y se despidió de ella. 


- Me muero, mamá.


- Anda, ven a casa.


Poco después le dijeron que abandonara, que esa vida no era lo suyo. Y, al que quisiera escucharle , contaba contrito:


- A mi es que me aconsejaron que lo dejara, por salud.


Un año después se casó. Por supuesto, nunca más se supo de esa extraña depresión.


¿ La razón?, la de verdad: el dinero.


Pero, eso sí,  " me aconsejaron que lo dejara".


M enteré que ha vuelto a pertenecer a la institución . ¿Por qué lo han vuelto a admitir? Es curioso, el pez que se muerde la cola: por dinero también.




5 comentarios:

  1. No entiendo, quizas puedas explicar, la razón de evitar mencionar el Opus Dei y usar la palabra “institución” en su lugar. Pasa a menudo a bastante gente. ¿Le tenéis miedo?

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  2. No es miedo. No sé lo qué eso. Sé lo que es estar acojonado, y muy acojonado,.

    Al opus dei lo conozco muy bien, y hay cosas que sí, y cosas que no, Pero tengo lectores , algunos familia, que pertenecen a la intitución, y quiero respetarlos.

    Por otro lado, en el principio de la entrada hablo de "arquetipo". Ezte hombre alñ que me refiero , que sí era del opus dei, y ha regresado a él, no me interesa por eso. Lo que me parece muy interesante es que es ejemoplo de muchas personas que necesitan un empujoncito exterior para tomar una decisión de vida..

    Puede ser en el matrimonio, en el noviazgo, de sacerdote, de monja, de lo que se quiera. A mi me producen pavor. Nada hay más despreciable, ni peligroso, que esa gente que cada noche se va a dormir con la conciencia tranquila.

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  3. O sea, ¿te refieres a esos acojonaos que no son capaces de tomar una decisión por sí mismos y necesitan la complicidad de otro para blanquear su conciencia?

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