En Lérida descubrí la montaña y alguna gente maravillosa.
Con algunos , Ernesto, Xavier, Jósum, Octavio , un farmacéutico - un señor- , Juamba, y otros, íbamos a Ordesa, Añisclo, la Peña Montañesa, Cotiella, Posets, Barrosa...eran días de una intensidad muy de escapada a ninguna parte . Estaba prohibido hablar de política. En las paradas que hacíamos a refrescarnos y descansar sólo se podía insultar a la dirección del colegio, a algún coleguilla trepa, en fin, a quién considerara cada cual que merecía ser ultrajado, vejado, puesto a parir.
En los lugares donde el eco era de una repetición de onda muy bestia nos poníamos excitadísimos: "¡¡¡ Miqueeeeeelllll Filldeputaaaaaa!!!" ..."¡¡¡suegraaaaa, vete a tomal pol culooooo!!!"
Allí no se salvaba nadie.
No había mala voluntad, la verdad. Era un modo de serenar el interior. Rajar así es una terapia sanadora, al menos para algunos. Conste que no todos los que he citado ejercían su derecho a gritar.
Una brisa constante daba en las cimas de aquellas montañas que hoy me están prohibidas por la fibrosis. Al regresar de la cima una sombra transgredida por una luz de. azafrán nos acariciaba la espalda y, mientras bajábamos, al aparcamiento recordábamos lances , películas que habíamos visto, o anécdotas. En ocasiones nos acuartelábamos en un repecho , cerca de una cascada, y nos bañamos entre espumas primordiales nacidas de un glaciar teniendo cada uno bajo los genitales un agua purísima y fresquísima.
Antes de llegar al aparcamiento íbamos a una taberna y nos zampábamos una butifarra, o longaniza con huevos fritos , una ensalada , y una buena jarra de cerveza con limón , en una terraza con vistas a la montaña con un gato a los pies y un jilguero en una jaula colgada de una pared encalada.
Depende de la hora , sobrevenía una de esas siestas que te dejan las comisuras inundadas de baba, al amparo de las chicharras enfebrecidas por un vientecillo de la tarde . Eran días llenos de sensaciones.
Al final la tarde se hacía dulce y entonces hacíamos un poco de filosofía de pacotilla dentro del coche, de vuelta a casa Seguía estando prohibido hablar de política y de otras adversidades.
Eran días que hoy recuerdo antes de dormir , pero sin insultar a nadie. Días en que llegábamos a la conclusión de que el fin del mundo podía esperar un poco.
Y esta noche, antes de dormir, le pido al buen Dios que espere un poco. Sólo un poquito.
Menuda pinta de intelectual con clase que tienes con ese careto y esos plantalones
ResponderEliminarSe llama " tener personalidad".
EliminarPersonalidad y “pebrots” menudo look! Me peto! Que crack!
ResponderEliminarTodavía queda gente que lee el País? Es de lo más sectario en España
Eliminaros recomiendo esta lectura:
ResponderEliminarhttps://elpais.com/diario/1993/08/08/ultima/744760801_850215.html
Yo también lo recomiendo: es uno de los s autores que más me inspiran.
EliminarTengo más.
Porque ha prescrito y no tendría recorrido, pero esos pantacas y esa camisola son de denuncia e inmediata ejecución sumaria sin posible amnistía aunque la avale Puchimón.
ResponderEliminarLa montaña tiene momentos maravillosos. Ese no pensar en nada más que en dónde poner la siguiente pisada, ese estado mental como de rezar el rosario, como de rezo de mantra budista, esa satisfacción de coronar la cima con el premio de las vistas, esos bocadillos en una cima soleada con buena compañía, esos ríos de agua helada.
ResponderEliminarEste verano me llevaré a los míos a Torla, Ordesa y por las gradas de Soaso a la Cola de caballo. No iremos por la faja de las flores, que a mi mujer le daría un infarto; pero cuando lleguemos al circo nos acordaremos de ti y nos desgañitaremos: ¡DE DOU, no em toquis els ous!, en plan homenaje...
ResponderEliminarGracias por acordarse
EliminarLe recomiendo vivamente, su mujer se lo agradecerá, subir a Mondoto, en Añisclo. En coche a Nerín y en dos horas y poco más a la cima.
Para mí de lo mejor que he visto
Si están solos aproveche y eche un kiki...no lo olvidarán en su vida.
He alucinado con el artículo de El País. Eso es plagio, Suso!
ResponderEliminarEs una forma de verlo. Alucina por nada. Además es usted el mismo que puso el enlace: no se haga el digno. Como ha visto que nadie ha reaccionado, pues vuelve la burra al trigo.
EliminarMañana habrá una entrada sobre este asunto. No creo la comparta .
Buen día.
¿Es esto un plagio? Son dos primeras estrofas de un soneto:
Eliminar"Quand’io mi volgo indietro a mirar gli anni
ch’anno fuggendo i miei penseri sparsi" (Petrarca)
"Cuando me paro a contemplar mi estado
y a ver los pasos por do me ha traído" (Garcilaso se la Pega)
"Cuando me paro a contemplar mi estado,
y a ver los pasos por donde he venido" (Lope se Pega)
Hay más sonetos, pero tengo que ir a Misa de una y no tengo tiempo de buscarlos. Se debe diferenciar intertextualidad, reescritura, plagio...
Mañana lo escribo. Gracias a este hater que se escandaliza - ay, pero por favor, válgame Dios, ¡pero cómo es posible!! , Suso, qué fuerte! - lo
Eliminarpasaremos bien.
https://youtu.be/LKXPt1O8VHs?si=OeuvvK8IyKL1MTBs
ResponderEliminarHermosa
Un dia de noviembre/diciembre de 1997 nos montamos en coche 🚗 con Artur y un profesor del Turó cuyo nombre no recuerdo-me suena que era de Espluga de Francoli- y tras cenar en El Grado -¿Las Acacías?- y dormir en el Poblado, partimos rumbo al Mondoto.
ResponderEliminarHacia mal tiempo y suspendimos la subida. Acabamos comiendo en un restaurante de Ainsa. Sacaste la guitarra 🎸 y el resto de clientes comenzó a pedir canciones: Mocedades, Albert Hammond, Roberto Carlos, ...
Jornada inolvidable ... de regreso "rajamos" en el coche ... 😉
Yo no eché de menos el Mondoto imagino que tu si.
Feliz domingo.
¿Llevarte a tí a Mondoto?...eso sí que es una proeza
EliminarUn abrazo fuerte Modestino
De Espluga de Francolí eran los Minguella. Muy buena gente👌.
EliminarEl andariego con los Panchos. No puede haber algo más Hermoso
ResponderEliminarMaravillosa canción
EliminarYo recuerdo los veranos en El Poblado.
ResponderEliminarEl miércoles, día de excursión, nos venía a recoger el autobús y subíamos todos dirección lago Marboré o lago Cregüeñas.
Aparcaba el autocar y nos bajábamos todos con nuestras "bambas" dispuestos a llegar a la cima. Camisetilla, tejanos, bambas y bolsa de comida (todas iguales, los del camping donde aparcaba el autobús alucinaban) y cuesta arriba; unos adolescentes con una misión.
Recuerdo que en el ascenso al Marboré había que cruzar un glaciar. Unos excursionistas con mayor aversión al riesgo habían puesto una cuerda para agarrarse y cruzarlo con seguridad. Iban muy elegantes: con su casco, su anorak (rak, rak, anorak), sus botitas con pinchitos para no resbalar y descalabrarse, y avanzaban lentos pero seguros (langsam aber sicher).
Empieza a llegar la masa de El Poblado en formación Tour de France: escapados, grupo persecutorio y pelotón (siempre había abandonos).
Nos agarramos a la cuerda de los excursionistas, avanzamos con nuestras bambas sin pinchitos, eventualmente alguno llevaba gorrita en lugar de casco y cruzamos el glaciar como si cruzásemos la Calle Balmes con semáforo verde. Por supuesto, adelantamos a los profesionales (amablemente nos dijeron que dejarían la cuerda para nuestro retorno, si sobrevivíamos).
Alguna bolsa de comida se perdió resbalando por el glaciar, no hubo bajas humanas (en ese momento el numerario no era un bien escaso).
Llegamos al laguito, un baño de agua helada y como posesos iniciamos el camino de vuelta.
Tengo una foto con barretina y el laguito detrás. Si la encuentro se la envío a Suso para que la cuelgue.
En fin, parece que los numerarios tenemos un tánatos que nos lleva a despreciar el riesgo: fumábamos como posesos, nuestro lema: lo importante es el alma, el cuerpo a tomar polculo, etc.
PS: el pasado verano falleció el sacerdote Fernando Monge, a la sazón destinado en Salzburgo, en un accidente de montaña (oración). Me enteré porque Santi Guarner viajó a Salzburgo para sustituirlo en su labor pastoral (oración).
Muchos numerarios han fallecido en este tipo de excursiones. Cuando digo muchos me refiero a que constantemente te enteras de algún incidente.
Quizá no sería mala idea comprarse casco y botas, al menos. En la foto veo que ibas con calzado deportivo.
Lo raro es que no mueran más.
EliminarEn mí caso, un milagro.
Buen comentario.
Por qué los numerarios fumaban tanto??
EliminarNo recuerdo ninguno que no fumara. No se si era porque, a la hora de hacer proselitismo, decir que se es de la Obra con un cigarro en la mano quedaba como más liberal...
Yo fumé desde los diez años, cinco antes que hacerme del Mallorca.
EliminarY lo dejé hace diez años.
A Álvaro del Portillo lo obligó a fumar el Fundador.
EliminarSé de un lector del Barullo que se echó un pitillo con él...¿verdad, Ramón?
EliminarEl bigote estaba muy de moda en los años 80. Ahora no, casi nadie lleva y casi todos los que tenían bigote se lo han quitado.
ResponderEliminarYo llevo bigotillo franquista, como homenaje al Caudillo.
EliminarMí respeto gordo.
Eliminar¡Cuanto daño hizo la serie de televisión de los ochenta "Mágnum P.I.", interpretada por el ínclito Tom Sellek! Fuisteis legión los que os dejasteis intoxicar por el influjo del actor, tratando de imitarle con su bigote.
ResponderEliminarYo llevé bigote antes que Magnum, no me quite méritos
EliminarTu hermano también tenía fama de bromista y temerario, pero quizás más cauteloso, sin acercarse a las líneas rojas, "respetando la Constitución"
ResponderEliminarA mí hermano lo domaron. Así me lo dijo hace años. Ir muy detrás de mí, y en Cataluña, le perjudicó. Otro Suso era demasiado.
EliminarSin embargo, es más Mendive que yo. Yo soy Zabaldica
En otra delegación, posiblemente, le hubiese ido mejor.
Es un tío extraordinario.
Cierto, era "el hermano de" ... pero a veces nos mandaba gente a Hz de los que ahora llaman con distinta capacidad... con la excusa de que su hermano era experto en capacidades ...
Eliminar"Respetando la Constitución", el otro día se me molestó un independentista en Zaragoza cuando le expliqué estando en Plaza Aragon: si vas ahora por Constitución terminas en Barceloan, pero si bajas por Independencia terminas en la Plaza de España. No lo entendió.
EliminarEl de El País es uno de los odiadores? Eso dice mucho de él. Pobre hombre.
ResponderEliminarEl tío se lo curra.. No es la primera vez que me descubre, y siempre se lo publico.
EliminarMe enternece el tío buscando mis fuentes.
Los que se dejaban bigote era porque querían aparentar lo que no eran. O sea, mayores e independientes siendo solo adolescentes. Era relamente ridículo, niñatos con ínfulas de maduros. Gracias a la opus, claro.
ResponderEliminarJoder, qué pesado con la opus. Es que habrá una entrada sobre el Curling femenino y saldrá la "exopusina me tocas la pepina" con su rollo de que en la opus las animaban a jugar porque las entrenaban para usar con más rapidez la fregona...¡venga ya, peñazo!
EliminarSi un poco pesado... en mi caso fue para hacer la mili y parecer mayor. De hecho entre llevar bigote, estudiar derecho y recibir arresto de manos del jefe de la Jujem, me respetaron un poco.
EliminarYo quería aparentar lo que era: Franquista.
ResponderEliminarEso no era un bigote, acaso un moscardón.
EliminarSi quitas lo que has fusilado del artículo de El País la entrada te queda de analfabeto con ínfulas de escritor
ResponderEliminarYa ya. Gracias. ¡ Y sigue comentando!
EliminarPor cierto, "ínfulas"...¿ es bueno o malo?
Eliminar¿Las ínfulas no eran esas cosas como almorranas o ladillas, profe?
ResponderEliminarHay que cogérsela con papel de fumar y llamársela con nombre "cuqui" para escribir semejante gilipollez de palabro: INFULAS...
En tu caso son fístulas, pero no supuran pus en tu caso, creo que es odio.
EliminarTe ha faltado solo escribir "en tu caso" una tercera vez, papanatas...
EliminarEsas fotos desprenden amistad, un aprecio que perdura durante años, unos recuerdos, que en la crueldad de la vida te dan momentos de paz y te animan a seguir. Gracias Suso, fueron unos días, que aun pasados los años, recuerdo con un enorme cariño. Nos vemos pronto.
ResponderEliminarUn abrazo muy grande, nos vemos.
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