La vida es un circo. Debajo de esa carpa que es la Tierra nos movemos en un mundo de payasos , acróbatas, malabaristas, contorsionistas, equlibristas, magos , domadores de perros, de felinos, enanos, deformes, mujeres barbudas, saltimbanquis, títeres, clowns, su jefe de pista, sus monos, elefantes...
¡Pasen y vean!
En el circo a los tigres se les obliga a pasar por el aro y el domador llega incluso a meter la cabeza en la boca de un león. Contemplar al rey de la selva sarnoso, con halitosis, obediente y temeroso del látigo es uno de los espectáculos más tristes que se pueden dar.
Todo en el Circo da un poco de pena.
Los payasos cara blanca producen cierta repulsión. Siempre se les asocia al pederasta , al asesino que se camufla en un maquillaje que oculta un mundo sórdido .
En el circo esperabas que el león se comiera la cabeza del domador, que el trapecista se estrellara contra el suelo, o que al malabarista le vayesen todos los bolos al suelo.
Todo da pena en el circo, que te ríes del pobre payaso al que le caen todas la bofetadas y se ponía a llorar mares de lágrimas mientras recorría con su llanto toda la pista mirando al ´público que reia su desgracia. Excitado por la tragedia del pobre idiota , el público se saciaba también con el propio y frenético jolgorio de la música que acompañaba sus tropiezos con redobles de tambor.
Hoy el mundo se ha transformado en una inmensa carpa sin salida alguna y nuestra condena consiste en no poder abandonar nunca el tendido y estar obligados a consumir, repetir, comentar y reproducir inexorablemente las imágenes idiotas, violentas y anodinas, que nos sirve la historia a través de las noticias.
Los payasos de hoy no se maquillan, ni llevan narioces rojas y zapatones , pero las bofetas son las mismas, y las lágrimas también.
Una cosa del circo que he vivido en las últimas semanas es que se asocia jubilación con dinero. En un libro sobre Wall Street de un tal Mike Mayo se hablaba de "the number": la cifra (ahorros) que te permitiría jubilarte y vivir a tutiplén sin trabajar. Para hacer qué, pregunto yo. Para que me envíe mi mujer a comprar el pan (por lo menos son buenos maridos, hay que reconocérselo!!!).
ResponderEliminarPara algunos el único sentido de la vida es conseguir esa cifra.
Es importante poder pasar una jubilación tranquila (sobre todo ahora que se alarga la vida innecesariamente, me refiero a la vida de los demás: la mía, por favor, alargadla). Pero hombre, si no tienes un hobby.
A lo mejor es envidia, que yo nunca llegaré a "the number" y voy a tener que morir con las botas puestas.