sábado, 9 de julio de 2016

LUCIFER

Conocí  un sacerdote  que me  dijo  que todos alguna vez  en esta  vida  hemos  visto  al  Diablo  , ya sea  de un modo físico, o  sintiendo su presencia de una manera  muy real.

-  No sólo  está en las Sagradas Escrituras. Sucede  que no todos  son conscientes de haberlo visto.

Cuando vi la fotografía  que ilustra  la entrada, y desde el primer día que la observé  , presentí en esa señora que está de pie observando  mi primera Comunión era Él.

Satanás  al acecho, enfrentándose a  Jesús en la Eucaristía, de pie, desafiando la  Presencia Real , mirando a la cámara con blasfema  actitud.. Travestido de  mujer beata. 

Poco después , aquel traje blanco se rompió y ensució en unos columpios  del restaurante donde comimos. 

 Después de una larga vida , sería un privilegio subir a la ladera de un monte para contemplar desde allí un valle muy verde y que, de pronto, se acercarse  el Maligno y me  dijese  en cuantas ocasiones  nos vimos. Y cómo salí de aquello.

Hay dos  mujeres , tal vez  el espíritu de esta primera anidara en ellas, de las  que en ocasiones pensé  estaban endemoniadas. Las  dos me  volvieron loco, y hubiese  vendido  mi alma  por estar a su lado.

No fue así.

  Dicen que  el rayo que te parte en dos sin matarte, te cura de todos los males. Ese  rayo del amor  que no me  mató  me sanó... Reumas, artritis y lumbagos no sé que son . Los huesos vuelven a recuperar la fortaleza. Las venas se limpian de grasa. El colesterol se va por las escotillas. Las neurosis, esquizofrenias y paranoias se esfuman. Si uno anda demenciado, la mente recupera el equilibrio, porque no hay electrochoque que pueda compararse con esa descarga fulminante del amor  que baja del firmamento. 

¿Pero y si es al revés, y  sí fui tocado por el dedo de Lucifer?

Dicen  que  Lázaro fue resucitado y de regreso de la muerte ya no pronunció palabra alguna. Su silencio tal vez se debía a cosas muy negras e inexplicables que había visto en el otro mundo. 

Cuando regresas de  ciertos amores  parece, al  menos así lo he sentido yo, que has estado en el infierno.

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