domingo, 31 de julio de 2016

EL LAGO DE VALLVIDRIERA.

Ayer  fui  de  excursión  al Lago de  Vallvidiera.

Llamar  lago a esa  alberca es  mucho  decir, pero  el rincón es simpático y tranquilo. 

Llegué   en los Ferrocarriles Catalanes. En las estaciones de  La Floresta, y Las Planas  acostumbran a  subir  tribus  urbanas  un tanto alternativas:  perroflautas, desgreñados, con perros  de razas  sospechosísimas , acompañados de niños  con roña  austera  y miradas  pícaras. 

Entraron  varios ejemplares de  estos seres  humanos. Frente a  mi   se  sentó  una señora  ancha, bragada , muy entrada en carnes. Mollar.

Unos  críos  ocuparon la plataforma y  se  pusieron  a  jugar con dos perrillos . Uno de  ellos tendría unos cinco años. Estaba  crecidito el chaval. En un momento determinado  dice “¡un momento!”. Y se va  a  la señora  que está delante de  mi , le   abre  discretamente  la blusa , le  baja el sostén , y le saca  al  viento  imperio sin pudor alguno una  teta  tibia  y  blanca cruzada  de  venas  azules. Ella  no dijo ni Pamplona. Lo más  normal. Miradas  de  perplejidad  entre el personal.

La  verdad es  que el chaval tenía los dientes  de Drácula, pero se amorró  al pezón succionando  como  un choto , y la madre , nada, tan feliz  y tan campante.

Uno ha  visto cosas  en la vida, pero   como esta  ninguna. Casi  me pongo a la cola  , como los correos  electrónicos  , a  ver si caía  algo.

El chaval dio unas cuantas mamadas  , y a  por  otra cosa  mariposa.

Del  Lago    se cuentan dos  leyendas. 

Una es que un desalmado  echó la cría de un cocodrilo  en sus aguas  y que años después, mientras se  refrescaba en sus orillas  una  excursionista  , el  Lacoste  le  dio una dentellada arrastrándolo al interior de  las aguas , mientras  la  mujer   gritó  “¡Ustié!”.Y no dijo más.

La otra  tiene  que ver  con la casa  que hay  unos  metros antes de alcanzar  el lago. Al parecer era  propiedad del  señor  Oleguer  Puigdellivol  i   Puig i Puig.  Se  decía  que este  caballero  tenía amasada  una fortuna  de procedencia   corrupta  y   por mediación del engaño  y las  malas artes. Había  seducido en su juventud a la  hermosa  heredera  de  una  riquísima familia. De regreso del viaje de bodas  en Costa de Marfil  la  bella  Eulalia  Pujol  i Dalló  falleció   mientras se  refrescaba en el lago. Dicen que  a dentelladas de un cocodrilo que  la arrastró a  las ciénagas del fondo. Los que lo vieron aseguran que se oyó “¡ustié!”. Y luego el silencio.

La cría de cocodrilo  lo compró en el viaje de novios  Oleguer:

- Cuando  crezca, amor, mandaré hacer con su piel unos zapatos y un bolso.

- ¡Ca maco ets!

En esa  casa se hizo  una  sesión de magia negra en el año  1935. 

Se había invitado al reputado  y siniestro “Doctor  Allavorens”. Presidía la mesa  acicalado como un elegante fantasma  de ojeras azules y mirada  villana. A su alrededor  cinco  personajes, entre los que se  encontraba  Oleguer.

- ¿Estás  dispuesto a todo?- preguntó Allavorens    al anfitrión. 

- ¡ A  todo!

- ¡Mírame  a los ojos!

- Allavorens  trazó una espiral en el aire  con el  dedo  índice  ante  la nariz  de  Puigdellivol , y como si ese  dedo  hubiese  anulado la  voluntad  de  aquel  hombre  con un lazo  muy fuerte , lo levantó de la silla, le  condujo  hasta  una ventana  que estaba abierta, y allí musitó  unas  fórmulas  mágicas     . Oleguer  quedó profundamente  dormido  e  inmóvil.

Le  vendó  los ojos, y le dijo “vuelve  al sitio  donde viniste”.

El  número  consistía en que  nuestro hombre, que no podía ver, regresaba  a su silla sin tropezar  en ningún sitio.

Pero percibida  la orden Oleguer reaccionó de  una  forma extraña. Vendado como iba se  lanzó  escaleras abajo  sin  encontrar obstáculo alguno. Abrió la puerta de  la Torre, y enfiló a  correr Collserola arriba , llegó hasta  el Tibidabo, bajó a Barcelona, dio la vuelta en la Plaza  Cataluña,  subió Muntaner arriba, alcanzó  de   nuevo  el Tibidabo, rezó el Señor mío Jesucristo  en la capilla del Santísimo, se  introduce  en  el bosque, y al llegar al Lago de Valvidriera se  sumerge  poco a poco en sus aguas , de sonde  sale un cocodrilo con  el fantasma  de  una amazona montada sobre sus fauces …

Unas ondas de agua  se formaron al  ser  devorado, y hasta  hoy.

Después, fui a Barcelona   buscando paisajes  humanos...mañana los subo a " Espacio Radical Libre", que  a partir de hoy tiene  nueva configuración: la  fotográfica






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NUEVO ESPACIO RADICAL LIBRE

3 comentarios:

  1. Si quieres otra experiencia antropológica, el día 11 de cada mes, por la noche, hay avistamientos de extraterrestres en Montserrat, dirigidos por un "iniciado". Se reúne mucha gentes: unos van en serio, otros de cachondeo.
    Acabo de leer la correspondencia de Van Gogh con su hermano, Cartas a Theo, y estoy entusiasmado.

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  2. La correspondencia es maravillosa
    Para mi un hallazgo

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  3. La correspondencia es maravillosa
    Para mi un hallazgo

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