viernes, 22 de septiembre de 2023

EL TIEMPO DA Y QUITA RAZONES.

Los lunes voy de voluntario a la Cruz Roja. Hace unas semanas encontré un grupo de chicas adolescentes marroquís, acompañadas de sus madres.  Al parecer , a una fundación rollo ayuda a  gente que apadrina un niño en los ochenta y sigue recibiendo dibujitos aunque el niño ya sea  Notario en Calcuta, le sobraban unos Ipads . 


Las niñas venían a recogerlos.


Es sabido que muchas de esas niñas, al terminar la ESO, regresan a su país de origen y las casan con una moro. Antes sus padres las cambiaban por una cabra, ahora la niña  vale más: tiene estudios, sabe usar el ordenador, y es muy limpia, paisa, barata, barata , barata.


A veces , aparece por allí un colega progre y cortito con sifón, con gafas como las del numerario Piqué, el de Esquerra Republicana, para lavar su conciencia y deja unos juegos de sus hijos. Es el típico tío que  compra chocolate en tiendas de Comercio Justo porque cree, el muy , que los 20 € euros de la tableta van directamente a un niño de una aldea de Burkina Fasso  que recolecta cacao descalzo y no puede ir al colegio.


Somos gilipollas, y ellos lo saben. 


Al final del siglo XIX, cuando España terminó por perder las últimas colonias de Cuba y Puerto Rico y se estaba desangrando en la guerra de Marruecos, nos  derrumbamos  moralmente.  Como  país, entramos  en una  espiral de  confusión política y un desprecio por la propia patria semejante a la que vivimos  hoy. 


Ganivet había escrito entonces que el problema de este país se solucionaba echando un millón de españoles a los cerdos. Ortega sentenció: lo que nos pasa es que no sabemos lo que nos pasa.

Nadie  sabe  qué  hacer.  La  vida  de  la calle  va  por  una senda, y  por  otra  la política,  disolviéndose  en un flato ensalivado de opiniones arbitrarias, juicios vanos e insultos en una algarabía de corral de gallinas. El  nivel  de  nuestros  políticos  es   ridículo. 

¿Adónde habrá que mirar para salvarse?  En cualquier punto donde fijes la mirada no hallarás sino a un Rey  acojonado, unos  magistrados  aguados  y apesebrados,   a un presidente del Gobierno que exhibe en público el impudor de su falta de escrúpulos , unos  nacionalistas  fascistoides,  a los banqueros que se premian con una masa ingente de dinero después de arruinar a los accionistas; a los obispos que bendicen este infame Cafarnaún con palabras hipócritas pronunciadas con el cuello blando, y  dependiendo  donde  están, sin molestar  mucho...

Quedan los ciudadanos que cumplen con su deber. La  gente  buena.

En Sodoma, Yavé estaba dispuesto a detener la lluvia de azufre si había un solo hombre bueno. Buscad a un buen taxista, un buen panadero, una  buena maestra, un labrador que mima  la  tierra, un cura santo  de  verdad, un  funcionario  que  sonría  y  no chape  para almorzar  y escaquearse.

A partir de un hombre honrado se puede levantar de nuevo una gran nación.

De  momento en España vamos empate entre autóctonos y  extranjeros. Sin embargo, basta ver el empuje de los marroquíes  para  darse cuenta que nos están colonizando.  

La  estadística  es  incontestable. La tasa de natalidad   en  Marruecos es de más del 21% . Aquí es mucho mayor  gracias al estado de bienestar y a la política de ayudas  sociales : imposible conseguir en sus países  de origen una sanidad y enseñanza gratuitas y de calidad.

Fuera  parte que en las comunidades  musulmanas la idea del Islam sobre los anticonceptivos está guiada por  los imanes, y es contraria a nuestras políticas.  Sus mujeres se casan muy jóvenes (más que las propias principales , no se  integran al mercado  laboral ( salvo en tareas domésticas). 

En fin, la coctelera está servida. Sólo falta  agitar.

Se proponen medidas para incentivar la maternidad, sin discriminar unas familias de otras. Podéis  imaginar  quienes se acogen a esos incentivos.

Por escribir  entradas así  a uno le llaman facha. Una pena. El tiempo da  y   quita razones. 

En el  fondo , todo será  resultado del precio de nuestro egoísmo, y nuestra  cobardía.




24 comentarios:

  1. Valdoví? Quién es? No pillo la referencia de Valdoví.

    ResponderEliminar
  2. Jopé! Pues Pizpireta no es que sea precisamente un chulo playa, más bien lo opuesto, no? Es que no me lo imagino en ese rol, la verdad.

    ResponderEliminar
  3. Yo me refería al de opus frustrados
    Pizpireta es buena gente. Chutado, pero buen tío

    ResponderEliminar
  4. El panorama descrito es real y por ello desalentador. Nuestros hijos no lo van a a tener fácil. No van a estar preparados para defender lo que se les viene y nosotros habremos sido los culpables por creer que algunas cosas son gratis.

    ResponderEliminar
  5. Este blog continúa un poco alejado de los valores, jeje.

    ResponderEliminar
  6. Suso! Ayer me puse a cantar sólo mientras conducía 'tengo un gusano de seda' y 'la paella' No sé si lo has llegado a explicar... pero ¿podrías recordar el origen de alguna de esa canción? Escribiste alguna más de esas del cancionero verde de los de Casa? Si oigo la pesca submarins, no me da por llorar, sino que me da diarrea...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues, precisamente esas dos...¡ ninguna es mía!

      Pero se agradece la intención.

      A mi la pesca me hacía gracia...y hay alguna que me gustaba...la de burrito de Noria es un horrorrrrrrrrrr

      Eliminar
    2. Pues pensaba que eran tuyas... la del idiota que le dio un derrame cerebral comiendo un helado, sí, ¿Verdad? Había algo en aquella canción que me recordaba algo del Betis...

      Eliminar
    3. Como un idiota sí, es mía...y muchas más.

      ¡Ay, qué tiempos!

      Un beso ( me da que eres mujer)

      Y si no, ¡ qué más da!: un beso.

      Eliminar
    4. Nono, soy un tío! Pero ya sabes que ahora se lleva todE

      Eliminar
  7. Dices que el nivel de los políticos es ridículo,…¿ no serán un reflejo de la sociedad? Desde luego no podemos darles ejemplo, menos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Entre Rufián, Valdoví, Sánchez, Garriga, Borja Sempere, aceitera aceitera y yo ( no sé usted, no le conozco)...hay un abismo.

      Eliminar
  8. Desde que no está Martinez Pujalte la política de este país es un erial. Pujalte daba espectáculo, con él por lo menos te desternillabas. La vida parlamentaria ya no es lo que era. Una lástima.

    ResponderEliminar
  9. Lo de insultarse no me digas que no los hacen uno de los nuestros. No somos tan distintos a los políticos de la palestra. La elegancia en este mundo ya no existe. Estoy de acuerdo de echar en falta a M. Pujalte, Roca, etc.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si usted echa a faltar a Martínez Pujalte , usted es gilipollas perdido, y este no es su blog.

      No sea tan sensible con eso de los insultos. LLamarle gilipollas no es un insulto, es una característica de su carácter, probablemente de nacimiento. Usted es un timo nigeriano. Un ecohistérico, probablemente.

      Eliminar
  10. "Por escribir entradas así a uno le llaman facha". Otros, en cambio, reconocemos que es usted un visionario. Un hombre capaz de analizar con valentía los ropajes de esta España. Un tío echao pa´alante (o como se escriba). Gracias, Suso. Le leo también mañana.

    ResponderEliminar
  11. Creo que echar en falta más que a algunos políticos, lo que se echa en falta, a mi modo de ver y sin quere faltar a nadie ya que hay mucha crispación ùltimamente por aquí, es la forma en que se decían las cosas. Vemos que se han perdido y en eso sí podríamos estar de acuerdo la mayoría. O no, que hay de todo y uno lo respeta (por si acaso).

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tiene razón. De mi diré que soy muy mal hablado, y escribidor de cuna - casi- y me cuesta eso de moderarme.

      Lo intentaré. Gracias.

      Eliminar
  12. Lo que se echa en falta es gente que sea capaz de ganarse la vida fuera de la politica

    ResponderEliminar