lunes, 15 de julio de 2024

CUANDO NOS UNE EL ODIO.

Lo peor no fue la pandemia que provocó el virus , por cierto, creado por nosotros, los hombres, esos hijos de la gran puta. 


Yo creo que la primera acción benéfica que se le ocurrió a Dios para proteger la naturaleza fue la expulsión de Adán y Eva del Paraíso.


Ya fuera de él, los putos humanos no hemos necesitado demonio que  nos tiente:   el hambre, la violencia, la dominación, las guerras, la locura de genética en manos de ideologías creadas para hacer  esclavos, las enfermedades confinadas al Tercer Mundo, la codicia de los ricos del mundo - países , instituciones y personas. La invención de dioses. 


Pero estos males  no causan miedo ni pánico porque no se transmiten a través del aliento y la saliva de los otros. Aunque hay un contagio moral por ósmosis del bien , también  del mal, y  de los tibios, que les da todo igual. Todo se contagia.


Hace unos días comí con un sacerdote. Me habló de un político local que comenzó a tratarse con mala gente. Eran muy amigos. Y un día le dijo:


- Ten cuidado con quién vas. Acabarás siendo como ellos.


- Yo controlo - le contestó.


Está en la cárcel.


En nuestra  historia se han extinguido especies  a causa de meteoritos gigantes, de volcanes y terremotos devastadores. También algunas civilizaciones se han ido al guano de la historia porque somos expertos en odiarnos por la sangre , por  la tierra, por la religión.


Lo vemos a diario. ¿ Qué diferencia a  los independentistas nacionalistas de Cataluña, de Euskadi, los de Isis , de la URSS o esos tíos con rostro preconstitucionalista,  con cara de "mecagüen tus muelas" ?  Les une el odio. 


Seguimos  bailando sobre las deslizantes placas tectónicas  del nacionalismo, de la religión, del poder. 


Hace unos cientos de años las epidemias  como la lepra y la peste bubónica se atribuían a un castigo de Dios, también las sequías , y para aplacar su ira se montaban procesiones de disciplinantes que se zurraban de lo lindo arround the world. 


En el Apocalipsis se dice que al abrirse el Séptimo Sello se hará un silencio en el cielo y siete ángeles tocarán sus trompetas de plata para anunciar el fin del mundo. ¡ Siete  tíos tocando la trompeta ! Rollo Rudy Ventura  & Herp Alpert  and the  the five  angels .


Hoy sabemos  que la vida es un episodio contingente, una aventura  en la historia de este planeta, que anteayer no existía y pasado mañana desaparecerá . Y en la Tierra se instalará un silencio de piedra pómez . No sé si sonarán trompetas o bastará que los chinos echen al viento imperio otro virus que la humanidad se contagiara por la saliva de unos a otros hasta irnos a la mierda.


Es triste pensar que  el terror vendrá porque quien te mate será quien más te quiera: ése que  te besa, esa que te  abraza, el que te da la mano, o ese que te cede el asiento en el metro, quien te ayude a cruzar la calle. 


Hoy , mientras escribo, España ha ganado la Eurocopa y Alcaraz en lo suyo  , otra vez,  y me quedo atrapado en la belleza de los recuerdos del ayer,  como un insecto en un fósil de ámbar, eternamente.










14 comentarios:

  1. Historias de los ochenta en Barcelona (para mear y no echar gota):

    https://www.msn.com/es-es/entretenimiento/musica/me-gast%C3%A9-tus-millones-en-prostitutas-y-puros-el-negocio-ca%C3%B1%C3%AD-m%C3%A1s-macarra-y-lucrativo/ar-BB1pWxsu?ocid=msedgdhp&pc=U531&cvid=df3cfb0d89bb4fadb092b40b8e3c7d07&ei=13


    ResponderEliminar
  2. La ambición de Barrabés antes de ser gurú de Begoña Gómez: "El talento se valora con reconocimiento económico y social".

    Me suena esa gilipollez. Urelles decía lo mismo.

    ResponderEliminar
  3. Hacía días que no se citaba a Urelles. Estaba preocupado. Qué alivio! 🫶🫶🫶

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Urelles es aquí un arquetipo, un modelo, un paradigma, un ejemplar,. Son dos seres en una unidad bifronte: codicia y beatería

      Eliminar
  4. Yo tengo la teoría de que todo odio es odio a uno mismo que focalizamos en los demás.
    Expresamos nuestras frustaciones en los otros y pasamos al odio, personal o con el reforzamiento del grupo.
    Acantilado acaba de publicar un libro muy bonito: la correspondencia entre Romain Rolland (premio Nobel de literatura) y Stefan Zweig entre 1910 y 1918, antes y durante la primera guerra mundial. Se titula "De un mundo a otro mundo".
    Un clamor contra el odio entre las naciones enfrentadas (Francia y Alemania/Imperio austrohúngaro). Una guerra sin sentido: diez millones de militares y diez millones de civiles y una paz vengativa que provocó otra segunda guerra mundial (Keynes escribió "Las consecuencias económicas de la paz" y se retiró de la mesa de negociaciones porque era un tío listo y sabía que las condiciones impuestas eran el preludio de otra catástrofe).
    Los países se han convertido en una ciénaga del odio, separando a los ciudadanos con muros o mejor: "cordones sanitarios", una especie de tampax político. Volvemos a tener una "policía política" y un caos en el poder judicial que no son más que manifestaciones del odio, facciones enfrentadas. Todo lo contrario que el salmo de ayer:
    La misericordia y la fidelidad se encuentran,
    la justicia y la paz se besan;
    la fidelidad brota de la tierra,
    y la justicia mira desde el cielo.
    No hace falta ser Keynes para darse cuenta de que esto no nos llevará a buen puerto. Suerte que la vida es contingente y ya soy "senior".
    PS: en mis conversaciones con exnumerarios me he encontrado a varios que, como yo, deseaban la muerte, que Dios les mandase una enfermedad terminal. Eso también era un infierno.

    ResponderEliminar
  5. Hay algo misterioso en el amor, igual como hay algo misterioso en el odio. Mi escepticismo científico se viene abajo muchas veces cuando pienso como somos (como soy) cuando amo; y como somos (como soy) cuando odio. El odio adolece siempre de una profunda ignorancia, de una ceguera, de una discapacidad. El odio es no verlo todo de quien se odia; es una reducción; es la imposibilidad de ver el valor infinito del ser humano al que se odia, que un día fue un niño, y que un día probablemente envejecerá, enfermará y morirá. El odio usa cualquier idea para justificarse, la deforma, la exagera, la aplica con el máximo o con el mínimo rigor según le convenga. Probablemente tiene una función natural en la vida de las bestias; pero estamos en un punto de la evolución en que ya empezamos a dejar de ser bestias y como especie nos damos cuenta de que el odio no va con nosotros y nos sentimos mal al evidenciarlo. Si escribimos contra el odio, y lo aborrecemos, es porque tenemos evidencia que el odio es contrario a lo mejor de cada uno. Los seres humanos no somos monstruos; somos un ser a medio hacer, capaces de ver lo que estamos llamados a ser ( lo que ya somos un poco) y de compararlo con lo que aun en buena parte somos cuando nos descuidamos.
    Parar, mirar despacio, mirar bien, ver el tesoro que es cada ser humano por perdido que parezca, para no odiarlo jamás; pienso (dentro de mi herejía) que así nos ve Dios a cada uno, que así ve incluso a aquellos que nosotros consideramos que odian o que han odiado más que nadie.
    PRISCILIANO

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, ¡ buen comentario!

      Eliminar
    2. Un comentario muy bonito que me recuerda a una poesia de Joao Cabral de Melo Neto (brasileño):

      MUJER VESTIDA DE JAULA
      Parece que vives siempre
      por una jaula ceñida,
      exenta, y en una jaula,
      por una jaula vestida,
      etc.

      Cada uno en su jaula....

      Eliminar
  6. Que el panorama mundial pinta mal es evidente. Pero no por eso voy a estar lametándome y afligiéndome constatemente y menos porque mis ideas y mi formación no sintonicen con muchas otras, ni con la de la mayoria.
    De lo perdido saca lo que puedas, dicen. Pues a eso nos debemos, a pasar lo mejor que podamos y hacer el bien, que es muy fácil decirlo pero veo a muy pocos católicos convencidos (se creen ellos) que lo practiquen. Lo único que hacen es desmotivar y poner de mala leche a cuantos se les acercan. “Todo mal, muuuy mal, no sé que vamos hacer, esto se hundeeee…” ¿Y qué? Pues es lo que nos ha tocado y todos, digo todos, tenemos alguna responsabilidad en ello.

    ResponderEliminar
  7. Actualmente el mundo va mal...

    Pero ojo..Aún así si la generación que vivió la guerra civil o/y la mundial, si a esa generación le hubieran ofrecido (con una máquina del tiempo) venir a vivir a la época actual... hubieran venido todos a la época actual y Corriendo además.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No son comparables los problemas actuales con los problemas de antaño: guerras, revoluciones violentas... etc.

      Eliminar
    2. Pues por eso, estamos infinitamente mejor que las generaciones precedentes.

      Eliminar