La Navidad es un cachondeo. Aquí, en Caldas, ya están poniendo las bombillitas y amenaza villancico cojonero.
En mi familia no éramos de poner el Belén. Se colocaba un Nacimiento. También cantábamos villancicos en días señalados. Pero no la vivíamos con ese rollo de mercaderes y de Media Mark, yo no soy tonto, y de su puta madre, y del black fridai.
En una bolsa guardaban mi madre los adornos navideños. Los bajaban del altillo a mediados de diciembre e íbamos desenredando espumillones y yo miraba mi cara abombada en las bolas del árbol. Nuestro portal no era de diseño. Unas pocas figuritas de plástico, la Virgen, el Niño, san José, la mula y el buey. Esa ceremonia, la de preparar la casa para las fiestas la mantenemos, pero nada sofisticada.
También ponemos una corona de Adviento. La Navidad , se trata de nacerse de repente, de echar mercromina a las rodillas de nuestra infancia.
Yo creo que todo se fue a tomar pol culo con Papa Noel . Allí se jodió el Perú, y lo estropeó todo. La Coca Cola y ese gilipollas con su risa "¡ho, ho, ho!", y su trineo, y los putos renos.
Hace unos días , en una charla que di en un colegio- ya os conté que iba de voluntario a impartir un curso sobre "Emociones" - les comenté a los crí@s, eran de 4º, 5º 6º de primaria, que yo había nacido el 25 de diciembre.
- ¡ A ver! , ¿ quién sabe quién nació ese día?
Un bosque de manos alzadas diciendo " ¡yo, yo, yo!"
Los cuatro primeros dijeron " Papá Noel".
Mucho Camino de Santiago y muchos mis cojones treinta y tres, y luego salen con Papá Noel.
En Caldas y comarca dentro de poco veremos papanoeles luminosos colgando de los balcones, como subiendo a un puticlú. . Los alcaldes compiten a ver quién la tiene más grande. La Navidad se ha salido de madre. Hubo un tiempo era una fiesta sencilla. La nostalgia es una cosa terrible, lo reconozco.
Turrón del duro o del blando. Esa era lo que había. En mi casa brindábamos con sidra champán el Gaitero. Las uvas tenían pepitas. No se anunciaban colonias con voces de putas francesas. Pero luego llegaron las prisas por ir de marcha después de Nochebuena. Los centros comerciales. Los tickets de regalo. Y la ilusión se fue transformando en urgencia, en mierda. De llamar al champan pán, y al vino vinagre.
Echo de menos aquellas figuritas pequeñas y mordisqueadas. Aquel San José con el bastón doblado y el pastorcillo con los ojos pintados con torpeza. Echo de menos aquella infancia con su visita al Rey Mago , su Cabalgata y el frío en las manos. Me hago mayor. La Navidad envejece conmigo.
Que le den pol culo a Papá Noel.
Recuerdo que en un centro de Barcelona del Bayer Leverkusen se quiso introducir la costumbre pagana del "caga tió", que celebra el solsticio de invierno. Traducido sería algo así como "caga tronco".
ResponderEliminarSe pone un tronco cubierto con un trapo, entran los niños con palos, golpean como posesos el tronco mientras cantan una canción, salen de la habitación, los padres (en nuestro caso el director) pone chucherías debajo del trapo, entra el jolgorio infantil que descubre el tronco y se reparaten las chuches.
Cuando se enteró la delegación se armó una grande. No sé si porque la costumbre es pagana o es infantil (en nuestro caso se sustituye a los niños de cinco años por universitarios barbudos).
Solo quería ser un homenaje a los ancestros escatológicos del catalán, como el "caganer" en el belén.
Para quien no lo sepa, en el belén catalán aparece un tío cagando.
No me imagino a Manolo Dacal cantando Caga tíó
EliminarMatizando: es una costumbre aragonesa. Vamos a llevarnos bien. La tronca de Navidad. Veo que llegó a nuestros territorios adheridos a la Corona. No está mal.
Eliminarhttps://www.turismodearagon.com/2019/12/24/conoces-la-tronca-de-navidad/
¿Y cantáis también gritando como posesos lo de "caga, tronca, caga...".
EliminarPor supuesto. Si no pa qué te vas a poner. Dentro vídeo: https://m.youtube.com/watch?v=xUMPfPO3nwg
EliminarPues leo que piadosamente decís "«Buen tizón, buena brasa, Dios bendiga a todos los miembros de esta casa».
EliminarLo escatológico es propiamente catalán.
Como el rey Midas, convertimos en mierda todo lo que tocamos.
El aire del Mediterráneo, quién sabe
Eliminarhttps://www.vidanuevadigital.com/2024/10/22/rouco-varela-ningun-obispo-esta-asediando-al-opus-dei-o-al-camino-neocatecumenal-todo-lo-contrario/
ResponderEliminarMe consta que Javier Marías no cae bien a algunos de los visitantes del Barullo. Lean ustedes sin animadversión, prepucios o cosas kantianas lo que dejó escrito, y luego copien cien veces "No hablaré mal de Marías sin haber leído nada suyo".
ResponderEliminarJavier Marías, Donde todo ha sucedido, pág. 151
""Hace demasiados años que nuestras ciudades están malhumoradas: se han hecho agresivas y crispadas, impacientes y poco cordiales y nada corteses. Si a este mundo se le exige de repente, a fecha fija, que se conmueva y tenga buenos sentimientos hacia sus semejantes y se reúna con la familia y demás, lo normal es que el resultado sea el contrario del propuesto y deseado. Es decir, que la propia demanda de todo eso, impuesta desde la ficción y la convención, irrite aún más al ciudadano que no puede o no sabe cumplir con ella. Por eso, supongo, desde hace ya muchos años la Navidad suele ser el período en que la ciudadanía está más odiosa, desquiciada, brutal, irritable, furiosa y asalvajada. Nuestras ciudades se convierten en escenarios de la tortura y la exasperación y por eso yo suelo encerrarme solo en casa a ver vídeos, para refugiarme en la verdadera ficción y huir de esa otra ficción bastarda a la que aún llamamos realidad.""
A mí no me cae mal Javier Marías.
EliminarSus libros me parecen un coñazo. No terminé ninguno.
Su padre me gusta mucho. Sus críticas de cine, muchísimo. Compré sus libros.
Usted ha puesto un párrafo de un artículo, y está muy bien traído
Gracias
Sonrójome
EliminarA mí me gusta más Julián Marías, su padre. Especialmente el libro "España inteligible".
EliminarMe gusta mucho la Navidad, porque me trae recuerdos agradables de tiempos en que yo era de los pequeños, y los mayores se desvivían por sorprendernos; hacían buenas comidas, cantaban canciones bonitas, abríamos regalos, y se hablaba de una profundidad que yo de pequeño intuía. La mística, la poesía, la profundidad humana... ya se dan en el universo mental del niño, por lo menos a mi me pasaba.
ResponderEliminarHoy intento hacer lo mismo con mis hijos. Me da absolutamente igual la significación religiosa doctrinal. La historia de Belén y del niño Jesús es bonita, y también me parecen fascinantes las saturnales, las antiguas fiestas romanas, antecesor histórico de la Navidad, en las que se decoraban las casas con plantas, y se encendían velas para celebrar que el día pronto empezaría a crecer. Seguro que todas las culturas tienen costumbres misteriosas y bonitas relacionadas con el solsticio. Y, con todas sus contradicciones, todas las comunidades humanas ponen su mirada en el misterio de la existencia, y en el amor como esencia de cada persona.
No me importan demasiado las tradiciones si no son las más íntimas y sencillas: estar juntos, reírnos mucho, tener mucha esperanza e ilusión, pensar en los que no están bien y ayudarles como se pueda, acercarnos a la naturaleza, cantar, comer juntos, unir las comidas que se alargan con las cenas, hablar mucho de cosas positivas...
No he celebrado nunca el tió, pero sé de muchos niños para quienes es una experiencia bonita; recuerdos que conservarán toda la vida.
Nunca lo he hecho, pero si pudiera me gustaría celebrar la Navidad en el hemisferio sur, en una isla del pacífico, en la playa; quizá algún día.
PRISCILIANO
Pensaba que a usted le agradaba lo navideño. Lea a Dickens, y a usted le agradara lo navideño.
ResponderEliminarLa tradición en un pueblo de la montaña aragonesa:
ResponderEliminarLos niños golpean al tronco desnudo, en un momento dado desde detrás unos adultos tiran con fuerza al tronco los caramelos, desde el punto de vista de los niños, los caramelos salen disparados del tronco. Podéis hacer la prueba. Nada de mantas, ni de salir de la habitación, ni nada.
Hay una bastardización de temas. En otro orden de cosas, la madrastra de Blancanieves es para hacer la historia más aceptable, me jugaría el cuello que en la historia original la madrastra no era tal, era su madre.
La pregunta que me hago es: Qué celebro en Navidad? Para mí es la historia del origen. Del de todos. De no estar en la soledad de la vida.
ResponderEliminarMe duele incluso decirlo, aunque me consta que no soy el único: la Navidad me deprime. Quizás la salve un poco el recuerdo de esa infancia ciertamente pobre, pero me la acabó de rematar esa juventud rica, esas navidades opulentas a mi modo de ver y de vivir durante esos años de militancia…
ResponderEliminarEstar abierto a la sorpresa, a lo que no se vé porque uno tiene los moldes hechos para ver e interpretar?
EliminarHacer lo que no se ha hecho todavía, ver que todo lo que se ve es una síntesis donde lo real se nos escapa.
Quizás en la noche más larga del año sea madrugar para ver como el sol sale.
Un abrazo
Cómo me gusta!
Eliminarhttps://www.youtube.com/watch?v=QUf2LyZ-_vw&t=9s
Y eso que lo j_d_n porque tienen que acabarlo en el tono mayor
Eliminarhttps://www.youtube.com/watch?v=QUf2LyZ-_vw&t=9s
EliminarOtros que dan un poco de miedo y el bajo desentona pero qué belleza, a partir de 4:33
https://www.youtube.com/watch?v=QUf2LyZ-_vw&t=9s
Carta para los que no escriben cartas:
ResponderEliminarDeja que el niño escriba su carta.
Deja que erre que erre, escriba.
…y cuando diga erre, ¡qué sueñe!
…y cuando diga diga, ¡qué pida!
No importe el paje que acierte.
Deja que erre, y regalo (dis) traiga.
Y cuando erre regalo, el niño diga.
Erre que erre, yo escribo mi carta.
…y si crece el niño y no quedan cartas.
Erre que erre, soñando siga…
Errejón no comerá turrones por Navidad
ResponderEliminarMorderá almohadas o soplará nucas
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