lunes, 14 de octubre de 2024

ZAPATOS: TU AUTORETRATO.

Van Gohg pintó sus zapatos, que  son  otro autorretrato.


También tus zapatos  dicen mucho de ti. 


Los zapatos están hechos para  vivir emparejados. Después, con el uso, el izquierdo tiene sus juanetes, el derecho  la forma curva de tus genuflexiones , que pueden ser de orar , o de besar los pies de tus amos.


Tus  zapatos   lloran  al recordar que un día calzaron a aquel niño que daba saltos al ir al colegio, que jugaba al fútbol en un patio infestado de niños , y un cura que se recogía la sotana . Zapatos que trepaban  a los árboles, que daban patadas  a las latas de la calle  , de   regreso a casa, cuando  aquella chica te dio calabazas 


Los  zapatos   de aquel chico enamorado que los frotabas al pantalón   para  lustrarlos antes de entrar al  Wellington.


Zapatos  de aquel joven con alma de  mártir que entrega su vida  a  un ideal que  le hizo pasar  noches de rodillas. Zapatos de   aquel hombre  enamorado que paseaba horas y horas de la mano de  una mujer que tenía  estrellas  en la mirada.


Zapatos  de un hombre  en paro que  va  pisando charcos y charcos , y regresa  a casa a  cenar pan  con lagrimas. Zapatos de   aquel anciano  que no puede atárselos  y su   mujer  se  arrodilla  para calzarlos. 


Tu  biografía  son tus zapatos, tu retrato, tu espejo. Todo comenzó con esos patucos que te compró tu madre, y siguió con esos primeros  pasos balbuceantes. O    aquellos que dejaste  en el  salón de casa  la noche de Reyes.


El alma , cuando  te agachas para  ponerte  los zapatos, también se abaja, y  queda  atrapada en ellos. Uno siempre es responsable de los zapatos que calza.


En  tu   memoria , aunque no  lo  sepas, están todos los zapatos que has llevado: los indómitos,  que te hicieron llagas que no has olvidado,  los flexibles, los dóciles, los  que  tuviste que tirar  porque eran de muy mala calidad:  así fueron , según  las  etapas de tu vida.


En Caldas  vi  un hombre hurgando una papelera  con un zapato en la mano buscando con ansia el otro par. A veces pienso que la felicidad consiste en la inminencia de alcanzarla y en la certeza de no conseguirlo nunca.


Y ya que estamos con los zapatos. No se me olvida mi primera visita al Cotolengo de Barcelona- un centro muy grande de todo tipo de discapacidades y personas con problemas- que nos hicieron limpiar zapatos de la planta de adolescentes y niños. Eran decenas. Y recuerdo que esas horas dale que te pego con el cepillo y el betún me dejaron un regusto muy bueno. Le di muchas vueltas a esa experiencia.


¡Ojalá encuentres ese zapato y que tengas una historia  con  ellos  que valga  la pena!




23 comentarios:

  1. En mi infancia usba "zocos" pa correr po las corredoiras cheas de auga. Esos los recuerdo con nostalgia. Los de las genuflesiones, hace cuarto de siglo y los olvide. Ahora buscó los de cada dia. Que me identifiquen con lo que soy. Libre y ligera de equipaje. A veces deportivas otra zapatos con la forma de mi pie, pero que me hagan el camino mas liviano. Si pudiera volveria a calzar os zocos con suela de madera y que en las tardes de invierno viendo como caia el agua mi padre me enseño como se hacian.

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  2. Los zapatos son una ayuda, un medio eficaz, para andar el camino, cada uno el suyo, a su paso y ritmo. No son imprescindibles (muchos andan descalzos por la vida). Y cuando ya no sirven se dejan en un rincón o se regalan para que otros los usen. Gracias a los zapatos andamos mejor por el camino de la vida y quizá son parte fundamental para llegar a nuestra meta.
    El gato 🐱 con botas

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    1. Gracias. Hay quien divide el mundo en dos: los que llevan zapatos, y los que van descalzos.
      Yo en mi casa siempre voy descalzo. O con calcetines de lana gorda en invierno

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  3. Y qué me dice de los que llevan zapatos high level. Quiero decir los que como mínimo se calzan unos Sebago y de ahí para arriba, sin más problema. Los que meten sus pies en Lotusse, Prada, Ferragamo... no le parece excesivo, incluso obsceno?

    Pues oiga, sé de, al menos, uno de los asiduos al Barullo que se cubre sus pies a diario con tan alto calzado. Y tan a gustito que va el hombre por la vida.

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    1. Que cada uno calce lo que quiera...

      - Porque las monjas no llevan sandalias?

      - Porque son más devotas

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    2. Las he visto benedictinas y adoratrices con sandalias…

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  4. Teníamos un hermano que llegó a preocupar a mis padres. Pero mi madre se mantuvo firme: un día encontrarás el zapatico de tu horma. Y lo encontró, vaya si lo encontró. Guapa, menuda vara de hierro que lo metió en vereda, y encima estaba enamorada de ella. No hubo preocupaciones, era el zapatico de su horma. El zapato, gastado o nuevo, limpio o sucio, de tu horma. Mi madre dijo más cosas, conste.

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  5. Esto me recuerda una vez que yo también hice una entrada sobre zapatos: http://madreconcarne.blogspot.com/2017/12/in-memoriam.html
    (Nada que ver con la tuya. No me salió nada profunda. Que me dolía en el alma deshacerme de ellos. Una tontería.)

    Se puede saber mucho de alguien por sus zapatos.

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    1. Pues me ha gustado mucho tu blog. Desenfadado, divertido, muy personal
      Gracias. Un beso.

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  6. Un zapato caro bien cuidado dura diez veces más que uno barato. Merece la pena. Yo también voy descalzo en casa,; y también añoro mis primeras chirucas, con las que desde el sendero al Ibón de Estanés buscaba sarrios en las alturas con la mirada. Daría todo por volver allí con doce años de imberbe edad.

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  7. ¿Puedo aportar la cita pedante, como otras veces? Esta es sobre el origen de las chirucas.

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    1. Parece que el nombre puede venir de la película argentina Chiruca (años cuarenta). En un momento dado, la protagonista, Chiruca, conoce a un ingeniero, se enamoran, ella no tiene medios y él le compra unos zapatos. Hasta ahí llego, no sé si es realidad o leyenda que llevaba unos zapatones… Agradeceré ayuda si alguien sabe.

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  8. Bonito entrada Suso. Las de cada día también suelen serlo, pero en la de hoy, me ha parecido muy interesante la metáfora.

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  9. Señor Mendive. Me devuelve los correos que le envío a la dirección que viene en la página.

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    1. Es muy viejo y está fuera de uso
      Escriba a comentarios y le contesto en privado
      Gracias

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    2. Vale, era una cosa sobre Rufino Montañés, de Barbastro. Pero igual ya no importa, gracias. Una foto de su tienda de vinos, con anécdota sin más. otra vez será.

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    3. Lo puede escribir en comentarios y si pide que no sea publicada , pues así se hará.

      No nos deje sin una buena anécdota, hombre.

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  10. Cambio de tercio. En vez de la anécdota, añado este link de un obituario publicado hoy https://rondasomontano.com/dedicado-in-memoriam-a-rufino-montanes-conseguidor-de-la-uned/

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    1. Muchas gracias. Muy buen obituario. Era un tipo inolvidable. Un baturro de un corazón como los Pirineos . Un enamorado de la Señora. Un pillo, siempre de buen humor.
      Las anécdotas se multiplican pensando en él. Nos queríamos mucho.

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  11. Suso, has visto "Las vírgenes suicidas"? Es una películas de hace 25 años, la primera que dirigió Sofia Coppola, en la que además trabajan, entre otros/as, dos actrices notables: Kathleen Turner y Kirsten Dunst.

    Yo no la había visto hasta ahora (la visioné este fin de semana) y he quedado en estado de shock. Me parece una película muy barullana por múltiples motivos y por muchos temas.

    Me gustaría/interesaría mucho conocer cuál es tu opinión de la peli en general y de las distintas facetas que se tocan. Gracias!

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  12. La vi hace años. La recuerdo rara. No sé si me gustó. La recuerdo larga y espesa.

    Familia pija yankee con principios religiosos fundamentalistas arruinan la vida de sus cinco hijas, ellas desean vivir como cualquier joven de su edad pero se encuentran con un muro y hasta pasan un tiempo encarceladas en su casa para no ver a nadie (ni siquiera van al colegio).
    Y se quitan de en medio.

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