CONSIDERACIONES DESDE MI ESTRELLA.

Conocí una Barcelona que enamoraba. Era una ciudad abierta, cosmopolita, de gente tranquila y curranta,   muy libre. Y sin esos pesados de nacionalistas , hijos de esa burguesía de siempre que se han cargado esa ciudad, y sus provincias.

Como los P. de Lérida. Sus abuelos eran de una casta, raza mejor , de raíz conservadora, fascistoide cuando tocaba, y antes carlistas. lo típico de allí. Hoy la mayoría  son de la seva.  Dos hijos numerarios, uno jefe de prensa de Aragonés, el otro hace lo que puede en la  fórmula Uno de la cosa independén.  Lo mejor de esa familia eran los culos de ellas, de las hermanas. Uno, que ha visto mucho pandero, y algo sabe, puede afirmar, sin miedo a equivocarse  que  "¡Mare de Deu , quins culs!

Aunque han pasado muchos años y ahora , quizás, se ha echado a perder.

Lo de ser numerario del opus dei y militar en Esquerra Republicana, y llevar gafas de pasta blanca, y flequillo Flipy , es como si la Madre Teresa de Calcuta se lanza con sus chicas al carnaval de Río , repartiendo rosarios y moviendo las tetas al viento imperio. Un sin sentido. Una esquizofrenia. 

Me dicen que ahora en la opus hay mucho así. En fin, ja s'ho faran!

¡ Qué manera de dar pol culo!  Hace años  que no voy a Barcelona . Acabé harto, hasta els pebrots de sus gilipolleces   , de su  hedor a gente aborregada  y  ese engolamiento de algunos al pronunciar " no es pusipla!, o " aíxó es inaceptapla".  

Al llegar allí a hacer carrera sí me gustaba. Cuando aquello era más otra cosa, más de todos y mi opinión acerca de la vida, de las cosas, y de uno mismo también era diferente.  Cuando paseaba sus calles, sus barrios, con cara de paleto, y el alma sin estrenar al pecado. Del mundo , de ese mundo, siempre he pensado después  lo peor. La Barcelona de esos años era otra Barcelona. Más limpia física y moralmente, y más segura. Hace años que esa mierda con la lobotomizada  Colau de alcaldesa semeja un vertedero y te puede pasar cualquier cosa.  A Colau le gustan que se atraque, que se mee en las calles, que se okupe. Y parece que a los barceloneses también. 

El poeta  Morales escribió sobre el  viejo cubo de la basura 

 ¡Oh!, viejo cubo sucio y resignado,

desde tu corazón la pena envía

el llanto de lo humilde y lo olvidado !

¿ Hablaba de Barcelona?

Me quedo en esta aldea lejana  de Teaño, lejana  como una estrella. Aquí nada  me inquieta. Allá afuera, donde la tele, la radio, las noticias, la puta política, que está más zorra que nunca, todo es inquietud. El mundo se está poniendo muy ideologizado. Muy jodido todo. Hasta el dios de este papa me parece ridículo. Un papa que dice cosas buenas y originales, sólo que las buenas no son nuevas, y las originales no son buenas.  

Mi vida es el jardín y la casa que habito. Y ya está.  Salir de aquí me parece algo espantoso , me encuentro  como esas películas de astronautas que  viajan al mundo exterior,  como si abandonara la atmósfera del  planeta Casa (y Jardín), pero hay que salir , no me queda otra ,  vencer la inquietud y lanzarme al vacío , es decir,  al espacio exterior.

¡  Qué asco me da todo algunos días!