miércoles, 4 de octubre de 2023

CUANDO NO INTENTABAN ENSEÑARTE NADA.

Somos lo que nuestros padres nos enseñaron cuando no intentaban enseñarnos nada. Cuando nadie les observaba, cuando cantaban en el coche de regreso de un día de domingo, cuando no se sabía que estaban sin un duro y te dejaban la propina encima del bocadillo, cuando rezaban sin esperar, cuando sonreían y no sabías la razón...


Somos lo que nuestros padres nos enseñaron cuando no intentaban enseñarnos nada. Por eso no soporto esos coachings  familiares  de medio pelo que  todo lo fían a una ejemplaridad de celofán.


Ese ejemplo que se da porque lo haces cuando nadie te ve  no depende de la edad que tengas, sino de haberte fijado mucho en las cosas. Y te fijas porque lo has visto tantas veces , porque esas actitudes eran parte del paisaje de tu vida . 


Y eso cala.  Porque, sin darse cuenta, esos padres vivían una sensibilidad moral con todo lo que les rodeaba  que empapaba el alma de todos.  


Sin  embargo, hay gente que ha vivido lo mismo que tú y son “piedra pómez”, marmolillos emocionales.


A mi padre lo admiro - ¡  cada vez más ! - en sus días de hombre fracasado ( porque tuvo días de diamante, y días de piedra)  , cuando venía a casa  , roto, después de intentar vender  unas marcas que representaba y que no valían nada. Cuando personas que le conocían le decían " ¿ pero cómo vienes con esto, Mendive?". Y a mi  hoy me parece un gigante. 


Cuando era chaval me admiraba su curiosidad, sus "manitas" haciendo cosas de la casa.  Yo me quedaba allí mirándole todo absorto como quien ve a un ingeniero de la Nasa montar un cohete. O lo mismo con temas del campo. Tengo amigos, grandes carajotes, que habiendo vivido exactamente lo mismo y en la misma época no se acuerdan  de nada.  


Y  mi madre, siempre de buen humor, siempre diciendo gansadas, siempre adelante, siempre optimista, siempre allí. 


Somos lo que nuestros padres nos enseñaron cuando no intentaban enseñarnos nada.




11 comentarios:

  1. Muy acertado el título de este artículo. Yo también recuerdo como enseñanzas el comportamiento de mi padre en la vida familiar, en su trabajo o con sus amigos.

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  2. Genial! Gracias. Ojos empapados mientras sonreía leyéndote.

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  3. "Res non verba" como con acierto decían los clásicos. Gran verdad, basta ya de charlatanes.

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  4. Después de años analizando los resultados de los coachings que mencionas, he concluido que dificultan gravemente el desarrollo físico y mental del padre

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    1. Uno, que ha sido coaching muy preparado, puede afirmar con rotundidad que todo eso es un montaje y un mojón 💩

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    2. Tal cual como lo describes. Me gustaría recalcar que tanta represión al instinto del padre no puede traer nada bueno

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  5. Tienes un corazón oceánico. Y agradecido.
    Me parece que me voy a aprender de memoria ese primer párrafo: "Somos lo que nuestros padres nos enseñaron cuando no intentaban enseñarnos nada".
    Cuando me muera —ojalá tarde—, pondré esas palabras tuyas como salvoconducto.
    ¡Gracias, granuja!
    Cuando digas, un Macallan.

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    1. Pues cuando te acerques por aquí, Pontevedra o Santiago, cae ( yo Jack Daniels

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  6. Sólo enseña de verdad el ejemplo. Por cierto, han condenado a tu amigo el payaso.

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    1. A los 80 años...¡vaya condenas se emiten en Cataluña...estoy esperando la del Horinable

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