lunes, 17 de abril de 2023

QUIÉRELE ANTES DE QUE SE TE MUERA.

Los dos años y medio que acompañé a Joaquín en su enfermedad fueron de una intensidad maravillosa.  Una vez leí " para qué caváis , si todo es tesoro". Es verdad. Y en la enfermedad, para el que lo sabe ver, el tesoro está allí, bien a la vista.


Visitar a ese hombre, que estaba atado a un cuerpo , preso en una enfermedad , era como ir a un exorcista  que espantaba todos los demonios. Uno salía de esa habitación nuevo, con ganas de ser mejor persona. 


Joaquín era del Opus Dei . Del Opus Dei sé muchas cosas, y espero algunas, porque soy hombre que juzga, y se equivoca mucho en sus juicios. Con él me equivoqué. Una vez me dijo " hace años a un tío como tú lo hubiese mandado a la mierda". Con eso de "un tío como tú" se refería a uno que hubiese dejado la obra. 


Con el tiempo aprendes que quien quiere que cambies solo quiere la versión de ti que le viene bien. Entonces aprendes que eso no es amor sino una pérdida de tiempo. Pues con Joaquín fue todo lo contrario. No quería cambiarme. No le importaba las razones de  mis decisiones, ni mi situación moral. Nunca hablamos de eso. Es más, le presenté a la que hoy comparte vida conmigo. Vino de Galicia sólo para eso. 


Pero no era de Joaquín de quien quería hablar. Es de su madre. ¡ Dios mío, qué mujer!


Cuando murió me dijo: " he hecho todo lo que he podido durante su enfermedad. Todo es todo. Estuve a su lado, le acompañé hasta el final durante todos los días de estos más de veinte años. No he querido perderme nada de  su camino de santidad. No quería que al morir me quedase algo por hacer, por querer, por perdonar.  Hay que querer a los vivos mientras están vivos...cuando se han muerto, ya es tarde".


Pienso mucho en esas frases, y en esa mujer. Pura alegría. Un cielo de persona.


No es fácil ser madre de alguien del Opus Dei, y más si es agregado. No es fácil entender a esos tíos si tú , además de su madre, no perteneces a la Obra, ni ganas. Pero allí estaba. Y se ganó el respeto de todos.  


En la foto que subo a la entrada están los dos. Ya eran los últimos días juntos, juntos aquí abajo. Él está contando algo. Ella atiende y entiende. María Rosa era la única que podía entender a Joaquín....¡ Dios, hay santos!


Bueno, lo que quería escribir es que si tienes alguien enfermo a tu lado - hay enfermedades que no se ven, pero están allí - quiérele. Quiérele mucho , antes de que se te muera. 




4 comentarios:

  1. Hay días, como hoy, que escribes unas publicaciones maravillosas. Siempre es bueno acercarse a nuestro mejor yo.

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  2. "Por qué caváis, si todo es tesoro". Oro puro.

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  3. No le doréis la píldora que se viene arriba. Bueno va...buena entrada

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