jueves, 16 de febrero de 2023

GRANDES CARENCIAS.

¿Por qué Montaigne necesita decirme que tiene el pene pequeño? ¿Por qué Virginia Woolf necesita escribir que tiene envidia de Katherine Mansfield? ¿Por qué Ligne narra que Voltaire se echó un pedo? ¿Por qué Bukowski se arranca con  que tiene 52 años y nunca se ha comido un coño? ¿Por qué Hemingway nos cuenta su visita al Louvre para comparar el pene de Scott Fitzgerald con el de las estatuas?


Había empezado mi vida sexual con mi novio”, contó Angelina Jolie -quien perdió su virginidad a los 14 años. “El sexo y las emociones no parecían suficiente. Ya no era una niñita y en un momento de querer sentirme más cercana a mi novio, tomé un cuchillo y lo corté, él también me hizo un corte.


Miranda Kher , otra actriz, "teníamos sexo como maratonistas kenianos”.


También sucede con algunas memorias y autobiografías de santos. Las escriben a calzón quitado. Pienso en santa Teresa, en san Agustín, o el mismo san Josemaría.


Creo a menudo que algunos escritores y personajes públicos   son como esas personas desconocidas que te cuentan su vida en una sola noche, delante de una cerveza, o de una copa, solo con la intención de que te acerques y seas su amigo. 


¿Qué  es un escritor de confesiones  sino una persona que no consigue ocultar su gran carencia de amor? 


Como todos, necesitamos que nos quieran. A veces de una forma un tanto extraña.


También pienso, y lo escribo en serio, que nos sucederá como se anuncia en las antiguas misas de difuntos , que se decía " quidquid latet aparebit" (todo lo que está oculto aparecerá). ¿Para qué esperar al  Juicio Final en el valle de Josafat? Mejor contar tu versión de la vida y sus cosas. ¿Vanidad?, quizás. Pero también el saber que todo lo que nos ha sucedido es algo que es propiedad de las personas. 


Verlas escritas libera de culpas y de rollos, sobre todo, cuando descubres que lo que te ha pasado a ti es algo que ha sucedido a muchos.


2 comentarios: